Los deportistas profesionales también están ayudando, a su manera, con lo que mejor saben hacer, a mitigar la crisis del coronavirus.
Sin ir más lejos, Jan Frodeno realizó un IRONMAN en casa el pasado fin de semana para ayudar, con los donativos obtenidos, a los hospitales de Girona.
Algo parecido está haciendo Geraint Thomas, ganador del Tour de Francia en 2018. El ciclista galés acaba este viernes el reto que inició el miércoles: estar en el rodillo 12 horas al día durante tres jornadas consecutivas, emulando los turnos de 12 horas que hace el personal del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido.
Tanto Frodeno como Thomas ya han recaudado más de 200.000 euros. Y siguen sumando...
Del mismo modo, Willie Smit, ciclista sudafricano del equipo Burgos-BH, ha estado dando pedales en el rodillo, sin parar, durante 37 horas, para completar 1.000 kilómetros. Al igual que Thomas, lo ha hecho en la plataforma Zwift y, en su caso, con el objetivo de recaudar fondos para ayudar a desarrollar el ciclismo en su país, a través de la Federación Sudafricana.
Smit ha transmitido el desafío a través de su canal de Youtube y ha publicado sus datos finales en las redes sociales. Ha subido 8.150 metros virtuales y ha quemado 17.081 calorías. Mantuvo un ritmo constante de entre 150 y 200 vatios, con una potencia normalizada de 157.