Frodeno: "Tomo una hamburguesa tras ganar Kona; lo demás es veneno para el cuerpo"

El triatleta alemán habla de sus saludables hábitos alimenticios.

Foto: @oriol_batista

Frodeno: "Tomo una hamburguesa tras ganar Kona; lo demás es veneno para el cuerpo"
Frodeno: "Tomo una hamburguesa tras ganar Kona; lo demás es veneno para el cuerpo"

Como ya sabemos, Jan Frodeno pasa gran parte del año en Girona. Y no sólo porque es un lugar óptimo para entrenar, sino también por su gastronomía. “Es una región brutal. Cuando estoy en Girona, solo como frutas y verduras catalanas", explica el bicampeón del mundo Ironman (2015 y 2016) en una reciente entrevista en www.focus.de.

El triatleta alemán, vegetariano desde 2017, describe cómo es y cómo cuida al detalle su estrategia nutricional, un aspecto que considera clave para obtener el mejor rendimiento. "Si confías en tu propio sentido común, sabrás que el codillo de cerdo con chucrut y las albóndigas a la hora de la comida o antes de un entrenamiento de carrera a pie puede que no sea la mejor alternativa", explica.

Lo más importante, en su opinión, es escuchar al propio cuerpo: "Todos deben comer lo que sienten. Después de todo, nuestro propio cuerpo nunca nos engaña. ¡Nunca! Por el contrario, nuestros cuerpos nos dicen exactamente lo que necesitan en cada momento. Hay que aprender a entenderlo".

Frodeno apuesta, pues, por los productos naturales sin procesar. Y rara vez se permite alguna licencia: "Sólo me como una hamburguesa con patatas fritas cuando regreso de Kona siendo campeón del Mundo Ironman. Todo lo demás es veneno para el cuerpo".

Sí le gusta comer pizza, aunque hecha de manera saludable. "De espelta, con alcaparras, salmón, cebolla y mozzarella de búfala… y una buena copa de vino tinto: ¡es lo máximo!", explica el campeón olímpico de 2008, que evita la carne y la harina blanca.

De modo que, después de entrenar, por ejemplo tras una sesión larga de bici, suele tomar “pescado con una ensalada grande, con nueces, atún, quinoa y batatas", menú al que también recurre habitualmente para cenar. En cambio, el desayuno, antes del primer entrenamiento de la jornada, solo incluye un café ‘espresso’, "porque es, con mucho, la mejor y más eficaz forma de quemar grasa. En el Iroman en Hawaii, con 40 grados de calor y una increíble humedad del 90 por ciento, no puedo absorber tantas calorías como quemo durante la competición. Mi cuerpo y yo tenemos que lidiar con este suministro insuficiente", aclara.

Después del primer entreno, Frodeno sí toma batidos de proteínas con plátanos y una gran porción de mantequilla de maní. En sus menús post-entreno, tampoco falta el pan sin gluten con un montón de aguacate y un huevo frito.

Asegura que para ganar el oro en Pekín, hace ya más de una década, tuvo que pasar hambre para poder llegar muy delgado. “Eso fue un infierno en la tierra y es inconcebible para mí ahora. Sin una buena comida y un buen ‘espresso’ no vale la pena vivir. La larga distancia es brutal. Por encima de todo, además de un cuerpo en forma, también necesito una mente bien descansada. El entrenamiento para el Ironman también es diferente y para eso he cambiado completamente mi dieta: más grasa, más proteínas y una bebida energética sensata", comenta ‘Frodo’, que también ha variado su manera de suplementarse y avituallarse en carrera: “Ahora, el nuevo gel es diferente: sin saborizantes, sin aromas artificiales, sin aditivos de color, sin conservantes. El llamado hidrogel consta solo de dos ingredientes: el alginato, que se extrae de las paredes celulares de las algas marinas; y la pectina, un tipo de agente gelificante que se encuentra en las manzanas, zanahorias y tomates".