Rotundamente, no...
El concepto 'detox' en la alimentación no tiene evidencia científica y su defensa, en todo caso, te puede llevar a comprar y consumir alimentos que no son necesarios. El organismo ya tiene órganos como el hígado o los riñones encargados de filtran y desintoxicar, y unos sistemas como el digestivo, el excretor y el respiratorio que se encargan de filtrar, depurar y expulsar las sustancias tóxicas fuera del cuerpo, así como las que ya no son necesarias o pueden ser perjudiciales excretarlas por la orina o las heces.
Respecto a la toxicidad que pudieran provocar determinados alimentos como el atún, pez espada o salmón, por su alto contenido en metales pesados como el mercurio, cadmio o plomo, o el arsenio, que hemos oído que está presente en el arroz integral, recomiendo seguir las indicaciones de la AESAN* (Agencia Española de Seguridad Alimentaria
y Nutrición). Basta con limitar el consumo de esos pescados o lavar bien el arroz integral antes y después de cocinarlo, o lavar bien la fruta y la verdura antes de consumirla para limpiarla de los compuestos químicos fitosanitarios, consejos que reducen la probabilidad de intoxicación.
El concepto 'detox” asociado a la dieta o a determinados alimentos es una estrategia de marketing sin base científica. Cuando uno recurre a tomar más fruta, verduras y legumbres y a beber más agua en vez de bebidas azucaradas o con alcohol o comida procesada, no está desintoxicando al organismo, lo que está haciendo es comer bien, comer como hay que comer, comida sana, variada, comidas equilibradas y alimentos lo menos procesados posibles, esto es: comida real.
Que a un zumo de varias frutas se le añada el licuado de verduras y se le atribuyan propiedades medicinales o depurativas es absurdo. Lo recomendable desde el punto de vista nutricional es comer y masticar esas frutas por separado y de forma integral, esto es, enteras, e ingerir esas verduras en un plato, dedicando un tiempo a masticarlas y saborear cada uno de los bocados que das al alimento, eso sí que es sano.
Comer una combinación de alimentos que contengan proteínas, hidratos, grasas, vitaminas, minerales y beber agua, va a permitir que en el aparato digestivo se absorban y participen todos estos nutrientes en las diversas funciones metabólicas del organismo, siendo necesaria para la vida la combinación de todos ellos. No por primar determinado nutriente o vitamina sobre otras, o bebiendo mucha cantidad de agua, se logra mejorar la salud, sino que de hecho puede llegar a comprometerla.
Muchas teorías que defienden determinados productos o dietas 'detox' utilizan argumentos de una manera sesgada e interesada. Por ejemplo, se sabe que consumir productos integrales como los cereales de grano entero que tienen mucha fibra o las frutas y las verduras disminuyen el riesgo de varios tipo de cáncer*, pero para prevenir el cáncer es necesario, además de que la alimentación sea variada, que se tengan unos hábitos saludables y un estilo de vida activo.
No hay alimentos curativos, ni con propiedades terapéuticas, ni píldoras mágicas, y sí un patrón de alimentación sano que combine los alimentos de forma equilibrada teniendo en cuenta las necesidades energéticas particulares, primando los productos de origen vegetal y reduciendo el consumo de procesados. En todo esto, el estilo de vida saludable, el ejercicio físico diario y llevar a la práctica en cada una de las ingestas las nociones básicas de alimentación pautadas por un profesional de la nutrición, hacen que los tóxicos no tengan cabida y que no sea necesario realizar nada más que disfrutar de la vida de una forma sana y activa para desintoxicar el cuerpo, la mente y las emociones.
1. www.aesan.gob.es
2. www.wcrf.org/dietandcancer/colorectal-cancer