El pasado domingo se disputó el IRONMAN 70.3 de Mont-Tremblant, en Canadá, con la victoria del que era a priori el gran favorito, Lionel Sanders, que continúa con su buena racha de resultados: fue 2º tanto en el Mundial IRONMAN de St. George (Utah, EE.UU.) del pasado 7 de mayo como en el IRONMAN 70.3 de Oceanside (California, EE.UU.) del 2 de abril.
El triatleta canadiense, de 34 años, se hizo con su cuarto triunfo en el 70.3 de Mont-Tremblant, después de los conseguidos en 2016, 2017 y 2018. En esta ocasión Sanders se impuso, con un tiempo en meta de 3:48:02, al mexicano Tomás Andrés Rodríguez (3:50:15) y a su compatriota Jackson Laundry (3:50:46), que había derrotado esta misma temporada a Sanders en Oceanside.
Sanders se puso en cabeza superado el ecuador del segmento de ciclismo. Y ahí se quedó hasta llevarse la victoria tras un sólido medio maratón a pie. Sin embargo, tuvo que hacer un esfuerzo extra sobre la bici, ya que se encontró una rueda pinchada en la primera transición, al terminar la natación. De hecho, como él mismo reconoció después de la prueba, se rompió un diente de tanto apretarlos mientras daba pedales.
"Es ridículo"
En el último vídeo que ha publicado en su canal de Youtube, no se ha cortado a la hora de criticar la norma de IRONMAN que obliga a los triatletas profesionales, al igual que a los de grupos de edad, a depositar las bicis en la transición el día previo a la competición. Según su punto de vista, la franquicia debería hacer una salvedad en el caso de los triatletas PRO.
“Salí de la transición, me monté en la bicicleta y la rueda delantera estaba pinchada. Creo que es ridículo que tengamos que depositar nuestras bicicletas en vísperas de la prueba, como entiendo que no se puede desarrollar una prueba de 3.000 personas sin que éstos dejen las bicis listas en la transición la jornada anterior. Literalmente estamos aquí para ganarnos la vida, así es como me gano la vida.
Hacer que traigas tu bicicleta y la dejes allí durante 12 horas, a más de 30 grados y a pleno sol... No creo que los neumáticos y las cámaras estén preparados para estar allí horneándose durante varias horas.
Si hubiera tenido la bicicleta toda la noche conmigo, le habría dado presión a los neumáticos antes de acostarme y luego habría comprobado por la mañana que todo está correcto.
En cambio, hinché las ruedas el día anterior por mañana y, posteriormente, tuvo una fuga lenta debido a que algo sucedió a lo largo del tiempo (horneándose al sol). Obviamente no aprecié esta pérdida de presión justo antes de la salida porque me fui para hacer mi calentamiento de natación", explica Sanders, que propone volver a la normativa previa.
"Antes podíamos dejar las bicis momentos antes de la prueba, pero supongo que no querían darles un trato especial a los profesionales. Pero no es que sea un trato especial, es nuestro trabajo, es mi profesión", concluye el canadiense, al que volveremos a ver competir en el Open de Canadá de la PTO en Edmonton el próximo 24 de julio, ante Kristian Blummenfelt, Gustav Iden o Pablo Dapena.