Espera a su compañera mientras iba al baño y después gana el Maratón de Boston

Desiree Linden dio la victoria a Estados Unidos en esta prueba 33 años después.

Espera a su compañera mientras iba al baño y después gana el Maratón de Boston
Espera a su compañera mientras iba al baño y después gana el Maratón de Boston

“Sinceramente, en la milla dos, tres, cuatro... no sentía que iba a llegar a la línea de meta. Le dije a Flanagan durante la carrera: 'Si hay algo que pueda hacer para ayudarte, házmelo saber porque creo que, si no, voy a abandonar'. Cuando se trabaja en equipo, nunca se sabe qué es lo que puede pasar. Ayudarla a ella me ayudó a mí. Creo que desde ahí sentí que mis piernas volvieron"… Con estas palabras, explicaba la flamante campeona del Maratón de Boston cómo empezó a fraguarse su victoria en la prueba que se ha disputado este lunes.

Hacía 33 años que no ganaba la prueba una corredora estadounidense. Desiree Linden, de 34 años, originaria de Chula Vista (California, EE.UU.), rompió esta racha. Y lo hizo en unas condiciones infernales y después de un gesto que engrandece aún más su victoria.

En un momento de la carrera, Shalane Flanagan (compañera de entrenamientos de Gwen Jorgensen), campeona del Maratón de Nueva York y una de las grandes favoritas, tuvo que hacer una parada en el baño. Y Linden decidió esperar a su compañera.

La imagen sorprendió a todos. Flanagan se separó del grupo de cabeza para ir al baño químico y Desiree Linden se retrasó para esperarla. Tardó unos 14 segundos en volver a la carrera.

“Me dio un codazo y me dijo que iba a ir al baño. Yo le dije que iba a bajar el ritmo un poco y que le ayudaría a volver al grupo", comentaba Linden en la rueda de prensa posterior a la carrera, un gesto que Flanagan agradeció: “Es una deferencia poco habitual”.

Sin embargo, el entrenador de Linden, Steve Hanson, explicó que se trataba de una decisión de respeto pero también estratégica: "Creo que ella tiene un gran respeto por Shalane que, habiendo ganado en Nueva York, era alguien con quien podía trabajar en el tramo final de la carrera. Creo que no quería que Shalane saliera por la puerta de atrás, quería que estuviera allí. Desiree no estaba lista para estar delante del todo todavía en la carrera. Ella quería que Shalane supiera que, si ella iba a buscar la cabeza del pelotón, iba a haber alguien que tirase, porque el viento en contra era brutal. Yo sólo esperaba que en ese momento ninguna otra corredora hiciera algún movimiento para que a ellas no les costara demasiado volver al grupo".

Pese a esos 14 segundos segundos perdidos, Linden logró ganar la carrera con más de cuatro minutos de ventaja sobre sus perseguidoras, en 2 horas, 39 minutos y 54 segundos. La también estadounidense Sarah Seller (2:44:04) y la canadiense Krista Duchene (2:44:20) completaron el podio. Flanagan finalizó séptima.