El pasado 20 de agosto, IRONMAN confirmaba de manera oficial que el Campeonato del Mundo de Kona, previsto inicialmente para el 9 de octubre de este 2021, quedaba aplazado al 5 de febrero de 2022, debido al "impacto" de la pandemia COVID-19 en la isla de Hawaii.
“El resurgimiento del virus y la nueva cepa Delta ha tenido un impacto significativo en la comunidad isleña de Hawaii. Combinado con importantes cierres fronterizos y restricciones de viaje para los triatletas clasificados, no hay un camino viable en octubre para albergar el Campeonato Mundial IRONMAN”, explicaba Andrew Messick, presidente y director ejecutivo de The IRONMAN Group. "Después de una extensa consulta con líderes gubernamentales y comunitarios de Hawaii, creemos que el mejor curso de acción es retrasar el evento hasta febrero de 2022".
Precisamente en Big Island (200.000 habitantes), donde todos los años tiene lugar la mítica prueba, hay más de 1.400 infectados por Covid-19. Con el agravante de que solo el 58 por ciento de los hawaianos están vacunados. Y entre los no vacunados el virus se está propagando a un ritmo sin precedentes. Además, la variante delta ha sido durante mucho tiempo la forma dominante del virus en las islas del Pacífico. En total, desde que empezó la pandemia, hasta 5.753 personas han sufrido el coronavirus en la Isla Grande. Actualmente, el 8 por ciento de las pruebas son positivas, con 40 pacientes de Covid-19 hospitalizados, lo que ha supuesto un incremento del 250 por ciento en las últimas semanas.
Así las cosas, al igual que en 1982, el año que viene habría dos ediciones del Campeonato del Mundo IRONMAN: una, en febrero; y otra, en octubre.
No está tan claro que Kona se mantenga como sede de la prueba de febrero. El propio Messick ha avanzado este jueves, en la conferencia de prensa previa al Campeonato Mundial IRONMAN 70.3 que se disputa este sábado en St. George (Utah, EE.UU.), que la compañía "está considerando todas las posibilidades, que incluyen potencialmente eliminar la carrera de Kona".
Actualmente, los viajes a Hawaii están estrictamente regulados, se requieren cuarentenas para todos los viajeros no vacunados y se aceptan registros de vacunación solo de un número limitado de países.
Semejante situación de incertidumbre representa para IRONMAN un desafío al que nunca se había enfrentado. "Es difícil saber qué decidirán las autoridades locales y estatales en términos de permitir un evento de la magnitud del Mundial IRONMAN. Y, lo que es más importante, actualmente no está claro cuándo se tomarán esas decisiones. Es decir, no podemos saber si las autoridades locales y estatales decidirán el próximo mes, el mes antes del evento o incluso semanas antes, seguir adelante con la carrera de febrero e incluso cómo se desarrollará la carrera de octubre de 2022", concluye Messick.