¿Las piernas de los triatletas se hunden en el agua porque tienen mucha masa muscular?

El batido eficiente se dice que es equilibrador y no propulsivo, ya que la propulsión en crol la realizan los brazos.

Alberto Cebollada

¿Las piernas de los triatletas se hunden en el agua porque tienen mucha masa muscular?
¿Las piernas de los triatletas se hunden en el agua porque tienen mucha masa muscular?

"Se me hunden los pies cuando nado y sigo sin mejorar nada. Me han dicho que es porque vengo de la bici y tenemos mucha masa muscular. ¿Esto tiene sentido?¿Qué soluciones tengo?"...

Vamos a ver si somos capaces de resolver esta cuestión.

La musculatura de tus piernas no tiene la culpa, es tu sistema nervioso central (SNC) el que no coordina de forma adecuada los músculos y el movimiento que se requiere al nadar.

No realizar un batido de piernas eficiente en el estilo crol es un problema muy frecuente en los triatletas que no han sido nadadores, provenir del ciclismo o del crossfit no es la causa. No se trata de que tengas más o menos musculatura y poca grasa en las piernas que por supuesto son aspectos que penalizan la flotación, sino que la causa principal de tus problemas en el agua está en que no realizas el movimiento de piernas de una forma eficaz y eficiente.

El problema radica en que falta la coordinación neuromuscular necesaria que permite mover las piernas de forma eficiente, la que logra que ese movimiento sea armónico, coordinado, que realice un “efecto látigo” iniciando la acción muscular en la cadera, involucre a la rodilla y después al tobillo, para permitir que los pies se eleven y el cuerpo adopte una posición más hidrodinámica.

La clave está en lograr que las piernas se eleven para reducir las resistencias. El batido eficiente se dice que es equilibrador y no propulsivo, ya que la propulsión en crol la realizan los brazos. La acción muscular debe orientarse a lograr elevar las piernas y reducir las resistencias al avance.

A esta carencia de la coordinación neuromuscular necesaria se suma la disposición poco favorable de las articulaciones de los deportistas que carecen de flexibilidad. En especial en el escaso del reducido ROM (rango de movimiento) en los tobillos, hace que se dispongan en una excesiva flexión. Esta falta de movilidad del tobillo impide que el pie adopte una posición hidrodinámica de extensión (flexión plantar) con lo que dificulta seriamente poder realizar un movimiento eficiente en el agua.

Un batido sin la coordinación necesaria es rígido y carece de la armonía y fluidez en la contracción y relajación de la muscula- tura, algo necesario para que el batido sea equilibrador. Una musculatura con un grado de contracción elevado, con mucho tono por falta de adaptación al medio acuático y carente de grasa, junto a una disposición de los tobillos en flexión hacen que la patada de algunos frene como un auténtico lastre.

La clave no solo está en hacer muchos metros de batido en el agua sino hacerlos bien, prestando atención a la realización del gesto técnico. Para ello, se necesita involucrar al SNC (sistema nervioso central), requiriendo la implicación consciente del cerebro para contraer y relajar la musculatura flexo extensora de la cadera, rodilla y tobillo de forma coordinada, esforzándose en cada patada por mejorar la eficacia del movimiento. El trabajo de técnica del batido de piernas en diferentes posiciones, con diferentes complementos como tablas, pull, aletas, gomas, etc., servirán para estimular y facilitar el movimiento coordinado de la musculatura que flexo extiende las caderas, rodillas y tobillos de una manera armoniosa.

El objetivo no debe ser propulsar sino lograr que el movimiento gane en eficiencia, lograr ese efecto látigo que logre transmitir la fuerza de la musculatura de las piernas al apoyo de presión de los empeines sobre el agua en total extensión. Esta mejora coordinativa permitirá elevar las piernas a la superficie y reducir proporcionalmente a su posición horizontal, las resistencias frontal y de succión. Para ello resulta de utilidad batir con aletas de diferentes longitudes porque además de favorecer la extensión de la articulación del tobillo permiten una buena transferencia del gesto técnico al nadar sin ellas, en especial las de pala corta. Usar bañadores flotadores que elevan las caderas ayudan a obtener información propioceptiva de una disposición del cuerpo más hidrodinámica.

Este trabajo técnico en una mejor disposición corporal puede servir posteriormente para transferirlo de forma coordinada con la acción propulsiva de los brazos. La posicion de la cabeza durante el nado debe corregirse y tratar de bajarla mirando al suelo, esto favorece por acción-reacción que las piernas se eleven y mejore su disposición. Como ves, no es cuestión de músculo sino de coordinación muscular, de lograr mediante múltiples y variados ejercicios un enriquecimiento neuromuscular que permita junto una mejora del ROM de la articulación del tobillo que tu batido de piernas vaya ganando en eficacia y en eficiencia.