Técnica de carrera: una cuestión postural

Trabajar nuestra técnica empieza por ser conscientes de nuestra postura y poder modificarla.

Cristina Azanza

Técnica de carrera: una cuestión postural
Técnica de carrera: una cuestión postural

Podemos definir la técnica de carrera como la secuencia de movimientos que nos permiten desplazarnos a una velocidad determinada con un coste energético dado. Cuando hablamos de técnica, intuitivamente pensamos en número de zancadas, tipo y lugar de apoyo, tiempo de vuelo... Todas estas variables relacionadas con nuestra técnica (dinámica de carrera) están mediatizadas y correlacionadas con nuestra postura corporal mientas corremos. Luego trabajar nuestra técnica empieza por ser conscientes de nuestra postura y poder modificarla...

Cuando hablamos de la postura del corredor, nos referimos a la forma en cómo se posicionan las diferentes estructuras del cuerpo durante la carrera. A priori, cada corredor adopta una postura personal. No es extraño distinguir un corredor a lo lejos y, aunque no veamos sus rasgos, reconocerlo por su forma característica de moverse. Aunque cada corredor tiene una postura característica (que puede variar en función de su antropometría, velocidad, fatiga…), sí podemos hablar genéricamente de posturas más o menos eficientes.

En la carrera a pie, en cada zancada, nuestro cuerpo se ve sometido a la fuerza de reacción del suelo, que suele alcanzar un valor entre dos y dos veces y media el peso del cuerpo (dependiendo de la velocidad y la cadencia). La forma en que gestionamos esta fuerza de reacción hace que la carrera sea más o menos lesiva y más o menos eficiente, desde el punto de vista del gasto energético.

POSTURA EFICIENTE PARA CORREDORES VS ERRORES POTURALES COMUNES

Si en el plano lateral de un corredor con una buena técnica trazáramos una línea imaginaria que recorriese cuello, cadera y tobillo, esta sería recta. Luego la primera premisa es que logremos la alienación de las estructuras articulares implicadas en la carrera. En segundo lugar, la “línea" debe estar ligeramente inclinada hacia adelante, con ello, conseguimos, por una parte, que la gravedad nos ayude a que el impulso sea hacia adelante y no hacia arriba (menor oscilación vertical=menor impacto) y que el apoyo sea más cercano a nuestro centro de masas (cadera).

Técnica de carrera: una cuestión postural

Técnica de carrera: una cuestión postural

Elementos de una postura correcta

1) Mirada: al frente. Si miramos demasiado arriba, estamos forzando una espalda arqueada hacia atrás con problemas lumbares; si miramos al suelo, generamos tensión en los hombros o la falta de tono muscular en el core puede hacer que nos arqueemos hacia adelante.

2) Posición cuerpo: ligeramente inclinado hacia adelante, con cabeza, hombro, cadera y tobillos alineados.

A tener en cuenta:

-Esta inclinación debe ser generada por una flexión a nivel de los tobillos, luego es conveniente incluir ejercicios de dorsiflexión si tenemos problemas de flexibilidad para mantener la inclinación correcta.

-Debemos trabajar la musculatura lumbar y abdominal para evitar el desplome del tronco.

3) Brazos: su función es mantener el equilibrio. No ayudan ni en el impulso, ni en la zancada. Su posición tiene que ser cómoda, relajada, con un ángulo aproximado de 90%, sin cruzarlos por delante del pecho. Las manos semiabiertas y relajadas.