Este domingo se ha disputado en Leeds la segunda carrera de las Series Mundiales de Triatlón 2021, donde Alistair Brownlee, de 33 años, doble campeón olímpico (Londres 2012 y Río 2016), ha sido descalificado "por comportamiento antideportivo durante el segmento de natación", con lo que dice prácticamente adiós a sus aspiraciones de competir en los inminentes Juegos de Tokio.
La realización televisiva de la prueba mostró una repetición de las imágenes del que fue el momento del "comportamiento antideportivo" de Alistair. "Completamente innecesario y DSQ justísima. Una cosa es luchar una posición y otra una aguadilla a un rival [el triatleta estadounidense Chase McQueen] que va en paralelo", explicaba nuestro colaborador Jaime Menéndez de Luarca.
Completamente innecesario y DSQ justisima. Una cosa es luchar una posición y otra una aguadilla a un rival que va en paralelo. @AliBrownleetri @chase_mcqueen3 pic.twitter.com/QF8Enyqmm9
— triluarca (@triluarca) June 6, 2021
De esta triste manera se despide de las Series Mundiales Alistair, quien ya descarta su presencia en los Juegos: "Me da mucha vergüenza ser descalificado. La acción en la natación fue completamente involuntaria y a mí me han hecho cosas peores en todas las carreras de las Series Mundiales. Sin embargo, he preferido no protestar".
Para valorar lo ocurrido en el segmento de natación de la prueba WTS de Leeds, nos quedamos con la reflexión que ha publicado @triluarca en su blog.
"Sin demonizar a nadie; el DSQ de Alistair Brownlee es un lance, se sanciona, se admite y listo, pero merece la pena valorar el protocolo de @worldtriathlon anti golpes y que necesitamos implementar en @TRIATLONSP y Federaciones Autonómicas, sabiendo que hay menos medios", introduce Jaime.
'Comportamiento en Aguas Abiertas y Triatlón'
Los más veteranos del triatlón recordaran aquellos trípticos que nos daban como guía de la prueba. Un consejo que se repetía recurrentemente era que nos situásemos en la salida de natación conforme a nuestras habilidades para evitar que nos atropellasen nadadores más rápidos o para evitar adelantamientos innecesarios. En aquellas épocas el nivel de natación no era tan homogéneo como el actual, pero ya entonces las salidas y las boyas eran fuente de conflicto, ya que para tener problemas mientras nadamos no necesitamos 50 triatetas de nuestro nivel, sino que nos basta con 4 personas rodeándonos.
Por supuesto, la lucha por la posición es fundamental en triatlón, ya que evitar contactos puede hacernos perder posiciones en T1 que luego sean muy difíciles de remontar. Cambios de ritmo, búsqueda de trayectorias secantes hacia la boya, movimientos evasivos de donde percibamos agresividad o incluso hacer saber con un contacto de la mano en el cuerpo de un rival que está invadiendo nuestro espacio son admisibles.
La natación de Triatlón de WTS de 2021, a pesar de lo que nos pueda parecer, es mucho más noble que la que referían miembros de la selección española de hace 20 años, relatando anécdotas de cómo otras selecciones buscaban a los favoritos en el agua para intentar abrirles la cremallera, aguadillas mucho más violentas que la que vimos este domingo de Alistair Brownlee al triatleta estadounidense Chase McQueen, arañazos y agarrones del tobillo para progresar.
World Triathlon ha tomado cartas en el asunto y vemos a menudo descalificaciones en pruebas internacionales por comportamientos agresivos. Pueden recurrirse y al ser grabadas en video la evidencia se contrasta con la percepción que hayan tenido los involucrados en el hecho.
El nivel en pruebas nacionales ha aumentado exponencialmente y hoy en dia los 100 hombres y 100 mujeres que participan en una prueba élite pueden llegar a T2 practicamente todos en menos de 2 minutos (emergiendo del agua cada segundo). No cabe duda de que eso va a generar confllictos territoriales, que se ven agravados respecto a las pruebas ITU porque los recorridos suelen tener la primera boya más cercana, los gorros no identifican bien a los infractores y los medios para vigiliar estos comportamientos son menores.
Mi reflexión final:
-Enhorabuena World Triathlon que diseñó un protocolo antiviolencia y lo aplica a rajatabla.
-Aconsejar a los triatletas que eviten los golpes innecesarios; son fuente de violencia y SIEMPRE perjudican a dos personas, el autor del golpe porque no se centra en nadar y quien lo recibe por motivos obvios.
-Dada la altísima calidad nadando en pruebas FETRI, aplicar dentro de los medios posibles un protocolo para evitar estos golpes, con una primera boya lejana, dorsales grandes en gorro y al menos una embarcación vigilando en modo preventivo.