En poco más de tres temporadas, Aída García, a sus 45 años, ha forjado un palmarés asombroso. En el reciente Campeonato del Mundo Multideporte de Pontevedra le ha añadido dos oros más, en la prueba de Duatlón Sprint y en la de Triatlón Cross. En Duatlón fue la mejor de todas las participantes de grupos de edad. En Triatlón Cross, sólo la superó una. Ya la campaña pasada se proclamó doble campeona de España en Triatlón Cross y Duatlón Cross de su categoría (40-44). También hizo el mejor tiempo de todos los grupos en Duatlón Cross y el segundo en Triatlón Cross.
Además, compite en ciclismo. De hecho, hace unos días se proclamó subcampeona gallega élite de contrarreloj y también ha participado en el Campeonato de España élite de ciclocross…
Todo eso, tan sólo desde 2015, cuando llegaste al triatlón… ¿Cuál crees que ha sido la clave para ganar tanto en tan poco tiempo?
Creo que puede ser la unión de que tengo buenas cualidades deportivas en todos los aspectos, que me gusta aprender y aprendo rápido y que observo y dedico tiempo a mis puntos débiles para mejorar. Compito en cuanto hay una ocasión y siempre salgo a ganar. Mi mentalidad es de ser la primera. Si no gano la primera posición, gano experiencia y puntos que mejorar y observo a los que ganan.
Después de los dos oros en el Mundial de Pontevedra, ¿cuáles son tus objetivos para 2019?
El 1 y 2 de junio, Campeonato de España de Duatlón Cross y Triatlón Cross; el 17 de agosto, triatlón media distancia de Buelna; en septiembre, el campeonato de España de Triatlón Olímpico; y ya en septiembre, aparte del Campeonato Gallego de Triatlón Sprint y Acuatlón, quiero hacer el Campeonato del Mundo de Triatlón Sprint y Olímpico en Lausana. Aquí puedo ser ganadora, pero tengo que conseguir ayudas económicas para poder participar.
¿Y para las próximas temporadas?
Subir a podio élite de ciclocross gallego y en España. Medirme con el ciclismo de élite gallego tanto en contrarreloj como en fondo y en MTB.
Pero mis objetivos son más personales que enfocados a alguna prueba en concreto, ya que todavía tengo que evaluar detenidamente en qué soy buena y competitiva. Me gusta probar cosas nuevas y dedicar más tiempo a lo que veo que domino peor. Así que mi objetivo es mejorar mucho la natación, la técnica de la bici de montaña y afinar en técnica de carrera. Luego esas mejoras las emplearé en las pruebas en las que realmente sea competitiva.
Nunca descarto ninguna prueba que pueda aparecer, salvo el Ironman, que físicamente me parece excesivo para mantener un equilibrio saludable. De momento me divierto con lo que hago y no castigo al cuerpo con el Ironman.
¿Te gustaría competir algún año en Kona?
No especialmente. Considero que es mucho dinero el que hay que invertir para disfrutar del deporte o de una prueba. No me parece racional tanto derroche.
¿Y en el Mundial XTERRA de Maui?
Precisamente como soy novata y desconocedora de las pruebas, me he enterado recientemente de la existencia del circuito XTERRA y no descarto decantarme el año que viene por esta opción.
¿Alguna otra prueba que te gustaría hacer?
También me gustaría hacer pruebas de MTB en varias etapas que iré buscando e incluyendo en mi calendario.
Antes del triatlón ya eras una apasionada del deporte. Llegaste a ser jugadora profesional de hockey… Cuéntanos cómo empezaste en el deporte cuando eras pequeña y cómo fue tu camino hasta llegar al triatlón…
Pues desde pequeña me gustaba siempre andar en bici y de mayor ha sido y es mi medio de transporte siempre que puedo.
Probé muchos deportes: baloncesto, voleibol, atletismo, escalada, parapente… que siempre compaginé con el hockey, que heredé de ver jugar a mi padre. Me quedó grabado. Estuve 20 años en división de honor como titular, que es la élite del hockey (no hay profesionalismo como se entiende en otros deportes.
Dejé el hockey en el 2006 por el embarazo de mi segunda hija y mi traslado a Villagarcía de Arosa.
Empecé tan tarde en triatlón porque estaba separada y con dos niñas pequeñas, así que, mientras crecían, el triatlón lo tenía con ellas todos los días en casa, trabajo y niñas, jejeje…
Había unos triatletas en Villagarcía que me animaron a empezar y me ayudaron a elegir bici según mis posibilidades económicas y para empezar, que es la que sigo teniendo. Yo intuía que se me iba a dar bien porque, aunque no destaco en nada, suelo ser hábil en todo.
A los diez días de comprar la bici y arropada por estos triatletas, probé mi primer triatlón en el que hice podio. Y enseguida, el Olímpico de Vedra se puso en contacto conmigo, me fichó y, al mes, ya quedé campeona gallega veterana de triatlón sprint.
Y con semejantes resultados, ¿no te gustaría competir en categoría élite?
He competido puntualmente en élite y es cierto que mis resultados han sido valorables. Claro que me gustaría competir en élite, pero, al ser novata, lo que voy es aprendiendo, conociendo y siendo cautelosa. Es un Veni, Vidi, Vici... estoy viendo y empezando a vencer. Sé que tengo mucho rango de mejora aunque es una situación rara que sorprende a mi edad.
También has sido pionera en la lucha por los derechos de la mujer en la Guardia Civil. Cuéntanos cómo fue aquella etapa…
Me tocó el papel de luchar, que no es que me guste especialmente estar en lucha, pero yo oposité a la Guardia Civil con la intención de pertenecer al grupo de rescate de montaña de Jaca. Y una piensa que en un cuerpo que se dedica a mantener la ley y el orden social va a encontrar justicia, pero para mi asombro fue todo lo contrario. Ya desde la academia, en la que cumplí arrestos por ducharme después de entrenar durante los recreos de las tardes. No me permitían ducharme porque era la única mujer que hacía deporte en el recreo, pero los hombres sí se podían duchar. Me invitaron a dejar de entrenar. Así que empecé a patinar. Eso me lo permitían sin ducharme.
No se me permitió ni hacer las pruebas para el grupo de montaña en la academia como a mis compañeros por ser mujer. Me dijeron que era un grupo de hombres en el que no querían distracciones. Callé por asegurarme la plaza, pero, una vez con la plaza en propiedad, me encontré con leyes sexistas y obsoletas respecto a uniformidad, permisos de matrimonio, lactancia, maternidad, servicio de mujeres guardias...
Mi paso por la Guardia Civil fue una lucha contra la Guardia Civil respecto a la mujer y respecto a los derechos fundamentales de las personas.
Hasta llegaste a sufrir arresto…
En aquellos tiempos te arrestaban, tenías que callar, cumplir y, quizá, reclamar si te atrevías. Cuando te daban la razón, no se castigaba a quien había ejercido ese abuso de poder sobre ti, ni te resarcían del daño moral ni económico que habías sufrido.
¿Cómo es un día en la vida de Aída García?
-Me levanto a las 6:45.
-Hago hipo-presivos y yoga o core.
-Hago la comida mientras desayuno con mi hija Lía, la mayor. Paula, este año, estudia en Madrid.
-Bajo a Kenia, nuestra perrita recién adoptada.
-Salgo de casa a las 8:05 con Lía, que va al instituto y yo subo en bici al trabajo…
Soy monitora en la piscina municipal de Serviocio, en Villagarcia. Los lunes, miercoles y viernes a las 8:20 entreno natación antes de mis clases de spinning, bodypump y bodycombat; y los martes y jueves salgo a correr un día por el monte y otro por asfalto con técnica de carrera y cambios de ritmo antes de mis clases. Luego doy clases de piscina a embarazadas y bebés y estoy de socorrista hasta las 15:00.
-Como con mi hija, nos sentamos con calma y es el momento en el que charlamos.
-Si puedo, echo una siesta de 15 minuntos y a seguir con las tareas de casa: compra, recados, reparar clases, estudios, cena; y a las 23:30, en la cama.
-Los miércoles por la tarde, que mi hija está con su padre, aprovecho a salir un par de horas en bici de montaña para avanzar en habilidades.
-Los sábados suelo salir a correr algo más largo para disfrutar del monte; y los domingos, si no compito, salgo en bici de montaña con la grupetta que se tercie a charlotear y compartir experiencias.
-Las tardes del fin de semana, para comer tarde, con calma, una peli, una siesta, un paseo...bajar el ritmo.
¿Cuántas horas/km haces a la semana en natación, bici y carrera a pie?
Pues va a sonar a poco, pero entre 5.000-6.000 metros de natación, 40-60 kilómetros de bici y 30-40 de carrera.
¿Tienes entrenador?
No tengo. Estuve unos meses con Pablo Dapena, pero a mí me gusta cumplir y sentía que en esa época mis hijas necesitaban más atención y no obedecía a los entrenamientos y eso me hacía sentir mal. Así que volví a entrenar por sensaciones y necesidades de mi cuerpo y asñi no sentir que me defraudaba a mí o al entrenador. Aunque Pablo siempre me dijo que él adaptaba todo a mi ritmo de vida, pero para mí ese no era el momento de fijar entrenamientos.
¿Y grupo de entrenamiento?
Tampoco. Entreno sola y a veces coincido con los trotacumes, un grupo de MTB de Villagarcía al que pertenezco, o con algún amigo que he hecho de cruzarme en la bici.
¿Le das mucha importancia al trabajo de fuerza?
Es fudamental. Lo trabajo en fuerza-resistencia. Y destaco también el trabajo funcional y de habilidades o destrezas
¿Cuidas mucho la alimentación?
Mucho. Creo que la alimentación que llevo es uno de mis secretos para hacer lo que hago sin lesiones y mantener mis capacidades como cuando tenía 15 años.
Mi alimentación se basa fundamentalmente en frutas y verduras frescas y crudas, grasas saludables de aceites y eventualmente quesos, pocos hidratos de carbono pero integrales, legumbres, frutos secos y pescado y marisco.
Siempre hay excepciones cuando compartes comidas con los amigos o familia o en las fiestas, pero muy compensado para tener siempre energía y bienestar.
Eres monitora en Vilagarcía de spinning, natación, body combat, body pump… ¿hasta qué punto te ayuda todo este entrenamiento ‘obligado’ a tus entrenos para el triatlón?
Pues hasta el punto de que es mi entrenamiento fundamental en invierno. Soy una privilegiada de poder disfrutar de ayudar a los demás a conseguir sus objetivos y que con ello yo consiga los míos en un ambiente dinámico, alegre y enérgico todos los días.
¿Cuántas horas de deporte acumulas entre tus clases y tus entrenamientos?
3 horas al día.
¿Cómo va el proyecto del equipo de ciclismo solo de mujeres?
Esperamos que en el 2020 vea la luz. Este año, con la formación de la junta, con 6 mujeres pero de diferentes puntos de galicia, los papeleos, el registro del nombre que hemos tenido que cambiar muy a nuestro pesar tras agotar todos los recursos… ahora por fin tenemos ya un nombre que nos han aceptado. Somos Atlántigas. Ya hemos empezado a tomar decisiones sobre logos, ropa, imagen del club, ayudas...
¿Por qué te identificas con el ‘viento de galerna’?
Soy de Santander y crecí viviendo galernas incluso en la playa de niña y me parecían una aventura. Se veía como entraba, todos corrian y se refugiaban, eran intensas y sin más ….calma. Me hipnotizaba esa situación.
¿Tienes algún referente entre los triatletas de élite que te inspire de manera especial?
Sin duda, Pablo Dapena. Le llamamos Pablito, pero para mí es grande, como persona y como deportista. En femenino, a Saleta Castro, tambien de aquí. Qué lujo tenerles cerca y poder coincidir con los grandes de aquí. Desde luego, Javier Gómez Noya es un gran ídolo. Me pica la curiosidad de coincidir con Raña por lo diferente que dicen que es. Creo que de todos hay mucho que aprender.