Carolina Routier, olímpica en los Juegos de Río de Janeiro 2016 (Brasil), en los que fue la primera en salir de las aguas de la playa de Copacabana, evoluciona del grave accidente que sufrió el año pasado, cuando, cerca de su Banyoles natal, en Girona, fue arrollada por un coche mientras se entrenaba, en bicicleta.
En una entrevista con la Agencia EFE que tuvo lugar en la localidad alemana de Hamburgo, donde este sábado acabó 45ª, 'Carol', que desde años comparte su vida deportiva y personal con el triple campeón del mundo Mario Mola, explica cómo se encuentra y qué perspectivas tiene con miras al futuro, con miras al que, aunque le "gustaría", no está "obsesionada" por clasificarse "para los Juegos de Tokio".
No sólo hace vida normal, sino que ha vuelto a competir en la élite de este deporte. ¿Cómo está, realmente? ¿Cómo se encuentra?
Estoy compitiendo, me encuentro bien; hago vida normal y puedo competir, aunque todo es algo más difícil, por las lesiones crónicas, diría ya, que me han quedado del accidente (principalmente en el hombro izquierdo).
Si digo que le sucedió algo malo, pero a la vez algo bueno, porque, al fin y al cabo está aquí, ¿estoy demasiado equivocado?
No, no. Estoy 'súper-contenta', porque cuando sucedió lo del accidente pensaba que no iba a volver a competir. Y menos aún, al máximo nivel. Así que estoy 'súper-contenta' de poder volver a la competición, que es lo que me gusta.
¿Qué recuerda, del accidente?
Del accidente, nada. Perdí el conocimiento. Y cuando me desperté estaba en el hospital; con mi familia. Eso es lo primero que recuerdo.
Y de todo el resto del año lo que sí tengo son buenos recuerdos, porque me sentí muy apoyada, con mucha gente a mi lado. Gente que hizo que las cosas fueran mucho más fáciles para mí, sobre todo en lo que se refiere a todo el asunto de la recuperación.
Su accidente le supuso un 'extra' de motivación a Mario, su chico, para que éste ganara su tercer título Mundial...
Sí, sí (sonríe). Es posible que le motivara para hacerlo bien. Pero a mí también me daba muchas alegrías desde el hospital, primero; y, luego, desde casa; viéndolo ganar o haciéndolo muy bien. Eso me daba mucha fuerza para poder seguir adelante yo.
¿Le obsesiona la idea de volver a ser olímpica? ¿O es algo que no le preocupa tanto?
No. Por supuesto que me haría ilusión; y voy a intentarlo. Pero no me obsesiona. Mi objetivo es estar a mi mejor nivel.
Y si mi mejor nivel merece estar en los Juegos, pues encantada. Y si no, felicitaré a las que vayan.
Al final, lo importante es que vaya el mejor equipo posible. Eso es lo que pienso.