Agua fría para acelerar la recuperación: ¿Realmente funciona?

Casi todos alguna vez nos hemos metido en una bañera, cubo o barreño gigante con agua fría y hielos después de entrenar.

Raúl Notario

Agua fría para acelerar la recuperación: ¿realmente funciona?
Agua fría para acelerar la recuperación: ¿realmente funciona?

El preparador físico o el fisioterapeuta te decían que eso era bueno para recuperar y tú, sin pensarlo, ¡para dentro! Todo, acompañado de algún que otro grito y rechinar de dientes. Lo cierto es que al salir del agua fría, todos experimentábamos una sensación de relajación y alivio. Aunque después de las últimas investigaciones científicas al respecto, ya no sé si era por salir de esa agua helada o por un verdadero efecto reparador.

Recientemente se ha publicado un estudio muy interesante sobre el efecto de la inmersión en agua fría sobre la recuperación en triatletas de élite. El objetivo era determinar esos efectos si se aplicaba el agua fría justo al terminar un Ironman y si esto repercutía favorablemente en los marcadores de daño muscular e inflamación post-esfuerzo.

En el estudio participaron un total de 33 deportistas, 22 hombres y 11 mujeres. Como en todos los estudios, hubo un grupo de control y el grupo sobre el que se aplicó el tratamiento de inmersión en agua fría (10º durante 10 minutos) y los resultados no son demasiado alentadores para los defensores de esta técnica. Lo cierto es que no se hallaron demasiadas diferencias entre ambos grupos en cuanto a recuperación muscular se refiere.

Sabemos que las tradiciones en el mundo del deporte son casi sagradas y cuesta mucho desterrarlas porque 'se ha hecho siempre y ha funcionado'. Pero lo cierto es que la ciencia avanza y sus estudios también y no es el primer estudio que se realiza al respecto siendo muchos de ellos desfavorables hacia este tipo de técnicas.

El problema es que muchos deportistas aseguran sentirse mejor después de realizar inmersiones en agua fría y aquí ya entre en juego el factor psicológico también.

Si hablamos de los efectos de esta técnica sobre el entrenamiento de fuerza, los estudios son aún más claros.  El estudio de Broatch y col. afirma que la inmersión en agua fría tras un entrenamiento de fuerza afecta negativamente, ya que disminuye las adaptaciones referidas a ganancia de fuerza y/o masa muscular. Sin embargo, ese mismo estudio deja abierta la puerta a posibles beneficios si lo que hemos realizado es un entrenamiento aeróbico, sobre todo esos efectos serían positivos a largo plazo, pero como hemos dicho, no tendría efectos inmediatos sobre la recuperación muscular tras el esfuerzo.

Referencias:

  1. Broatch y col, 2018; Sports Med 7-abr; doi: 10.1007/s40279-018-0910-8
  2. Stearns y col, 2018; J Sci Med Sport 31-ene; doi: 10.1016/j.jsams.2017.12.011