La última vez que le vimos competir fue en el Campeonato del Mundo Ironman 70.3 de Sudáfrica el pasado mes de octubre. Jan Frodeno realizó una exhibición y se impuso con autoridad a Alistair Brownlee y a Javier Gómez Noya.
Sin embargo, poco después anunció que sufría una fractura por estrés en la cadera y que, por tanto, decía adiós al Mundial de Kona. Ahora, más de siete meses después, por fin regresa a la competición. Renunció al Ironman 70.3 de Oceanside del pasado 6 de abril porque él y su entrenador, Dan Lorang, decidieron posponer su debut en este 2019, pero este domingo sí estará en la línea de salida del EJOT Triathlon Buschhütten, en Siegerland (Alemania).
Esta prueba se disputa sobre las distancias de 1.000 metros de natación (en piscina), 41,9 km de ciclismo (sin drafting) y 9,5 km de carrera a pie. En 2018, en esta misma prueba, Patrick Lange, vigente bicampeón del mundo Ironman, acabó 3º, por detrás de Florian Angert y Andi Böcherer.
En principio, después de esta primera toma de contacto con la competición, el bicampeón del mundo Ironman (2015 y 2016) haría el Ironman 70.3 de Kraichgau (Alemania) el 2 de junio, donde el año pasado se impuso a Lange.
El 30 de ese mismo mes, repetirán duelo en el Ironman de Frankfurt. Allí, en 2018, también ganó Frodeno.
El 8 de septiembre intentará revalidar su título en el Campeonato del Mundo Ironman 70.3 de Niza, siempre y cuando se sienta bien a esas alturas de temporada y su participación no conlleve ningún riesgo de lesión, para evitar lo ocurrido en 2018, según dejó claro Félix Rüdiger, el mánager de Frodeno.
Y por último, como no podía ser de otra forma, cerrará 2019 con la gran cita de la temporada: el Mundial Ironman de Kona del 12 de octubre, donde, a sus 37 años, aspira a la que sería su tercera corona en Hawaii.
