El Triatlón Sprint de Mezalocha (Zaragoza) tenía prevista la celebración de su tercera edición para el pasado sábado 28 de mayo, en una prueba que iba a servir además como Campeonato de Aragón de Triatlón Sprint 2016. Un día antes (el viernes 27 a las 11:00 horas), el Club Triatlón Europa -organizador de la prueba- recibió comunicación por parte del Departamento de Justicia y Política Interior del Gobierno de Aragón de la denegación de los permisos para la celebración de la misma. El motivo esgrimido era “el informe desfavorable de la Guardia Civil de Tráfico conforme a su nueva normativa de solo atender a un evento por Subsector y por día””.
Según anunciaba la Federación Aragonesa de Triatlón (FATRI) ese mismo día, “a pesar de que la comunicación administrativa ha llegado a las 11h de hoy viernes totalmente fuera de plazo, tanto el club organizador como nuestra Federación han realizado todas las gestiones necesarias tanto con el Gobierno de Aragón como con la Delegación del Gobierno para buscar una solución in extremis, que finalmente no se ha producido. Por ello lamentamos profundamente comunicar la suspensión del evento enmarcado dentro de una nueva problemática nacional en la celebración de eventos”.
La organización, que devolverá el importe pagado a todos los deportistas inscritos, lamentó profundamente las molestias ocasionadas a todos los estamentos que iban a participar en esta competición, “que se había organizado con la máxima ilusión por parte del Club Triatlón Europa”.
El triatlón aragonés exige soluciones
El sábado 28, a las 17:00 horas (momento en que debía iniciarse el III Triatlón de Mezalocha), más de un centenar de deportistas de diversos clubes de Aragón se dieron cita en esta localidad para exigir soluciones a los representantes políticos ante la nueva situación de incertidumbre que acecha a la organización de eventos deportivos en esta comunidad, alertando de los graves perjuicios que está ocasionando.
Posteriormente, una larga caravana de ciclistas y de coches acompañantes realizaron el trayecto previsto en la competición entre Mezalocha y Muel. La caravana se organizó en varios grupos ciclistas de menos de 50 unidades para no infringir la ley de tráfico, ya que al lugar se trasladaron agentes de la Guardia Civil que vigilaron en todo momento lo que allí ocurria. Era un hecho con el que ya se contaba, a pesar de que la falta de efectivos para controlar las competiciones fue el argumento esgrimido para solo autorizar un evento por día y por subsector de tráfico.
Las muestras de apoyo al Club Triatlón Europa no han cesado desde entonces, ya que el perjuicio económico generado a este modesto club es muy importante. La Federación Aragonesa de Triatlón, y todos los clubes que la componen, han exigido una solución urgente a este conflicto por el bien del deporte, y para satisfacer la creciente demanda deportiva de la sociedad aragonesa.
