En marzo de 2018, Mhlengi Gwala fue víctima de un ataque que parecía sacado de una película de terror. Tres delincuentes le asaltaron en pleno entrenamiento de bici en Durban (Sudáfrica) e intentaron cortarle las piernas con una motosierra.
Siete meses después del macabro suceso y tras un largo proceso de recuperación, Gwala, de 28 años y padre de dos hijos, regresó al triatlón en el Standard Bank Ironman 5150 de Ekurhuleni (Sudáfrica). Compitió en el formato más corto (400 metros de natación, 20 km de bici y 5 km de carrera). Acabó 7º de la general y 1º de su grupo de edad (25-29).
El pasado mes de diciembre, Gwala fue unos de los 70 ciclistas que completaron la ruta de dos días y 606 kilómetros desde Johannesburgo hasta Durban, que buscaba recaudar fondos para los jóvenes desfavorecidos de la zona. "Estos dos días han sido muy difíciles para mí. Pero estoy muy feliz de haber vuelto a la carretera y estoy bien. A mis agresores les perdono. Ya estaban perdonados en los primeros días, tras el ataque", explicaba entonces.
Pero su increíble historia de superación continúa. El pasado fin de semana compitió en su primera Copa del Mundo de Paratriatlón. Fue en Funchal, en Portugal, en la categoría PTS5, su primera experiencia en una prueba de este nivel. "Ha sido una carrera muy dura para mí. El ritmo ha sido muy alto y no he hecho una buena carrera. Ahora necesito volver a casa y trabajar duro. Sé lo que tengo que hacer la próxima vez", explicaba después de la competición, en la que acabó 9º, en la última posición, bastante alejado de sus rivales. En junio ya había competido en una Copa de África de Paratriatlón, en Shandrani.
"En la natación estoy bien y en la bicicleta, también, pero en la carrera a pie tengo que aterrizar más con el talón porque puedo sentir que la fuerza se me escapa por ahí. Lo tengo comprobado. Por supuesto, mi sueño ahora es llegar a Tokio 2020. Es el sueño de todos los triatletas que compiten a este nivel", añadía.
Seis meses antes del terrible ataque, en la Gran Final de Rotterdam 2017, Mhlengi Gwala hizo el decimotercer mejor parcial de carrera a pie en su grupo de edad (25-29). Corrió el 10.000 en 34'25" para acabar en el puesto 45º. Pero después de las operaciones a las que tuvo que someterse (en la última le implantaron una barra de metal), sabía que el mayor desafío sería volver al mismo nivel que tenía, sobre todo en la carrera a pie.