El pasado 28 de octubre, Roger Serrano saldó su tercera participación en el Mundial XTERRA con una 10ª posición en la categoría PRO, su mejor resultado en la prueba de Maui (acabó 11º en 2016 y 27º en su debut en 2014). Fue el colofón a una gran temporada, con cinco victorias XTERRA (Malta, Chipre, Italia, Noruega y Dinamarca). Además, se proclamó campeón de Europa XTERRA. Sin embargo, el triatleta catalán ha decidido abandonar el triatlón para trasldarse a Suiza y empezar una nueva vida...
-Lo dicho... hemos visto que andas por Suiza 'alejado' del triatlón. ¿Lo has dejado?
Creo que sí. Eso parece por el momento.
-¿Por qué?
Bueno, el triatlón y el XTERRA son deportes bonitos, pero no soy más que un deportista de segundo o tercer nivel. Aunque es muy bonito viajar por el mundo montando en bicicleta, económicamente solo te da para subsistir, igual que la mayoría de empleos en España, la verdad...
-¿Es una cuestión meramente económica?
No, no es solo una cuestión económica. Siempre he sido una persona con muchas ideas en la cabeza y quiero poder hacerlas realidad algún día. El triatlón es un deporte muy exigente (como muchos otros) y estos dos años me ha sido muy complicado combinar mis proyectos empresariales con el deporte de alto rendimiento. Así que he decidido dejar un poco de lado la alta competición para así tener más tiempo para mis ideas locas.
-¿Es un adiós definitivo?
Pues no lo sé, la verdad. Ahora estoy centrado en mis objetivos de trabajo y proyectos de futuro inmediato.
-¿Qué haría falta para que Roger Serrano volviera al triatlón?
¿Al profesional? ¿Que me dedicara 100% otra vez a entrenar y competir a la vieja usanza? Eso no pasará, seguramente. Es pan para hoy y hambre para mañana. Tengo 28 años y no quiero plantarme con 35 en el mundo laboral empezando desde 0. A las empresas o a tus clientes les importa muy poco cuántos XTERRA hayas ganado si luego no eres capaz de hacer tu trabajo. Sí, siempre ayuda para entrar en según qué círculos, pero a la larga la calidad de tu trabajo y tu experiencia es lo que mantiene tu posición laboral.
-¿No te has planteado intentarlo en otros formatos: media distancia, larga distancia...?
No. Puede que más adelante me prepare para algún triatlón 'guay', de estos con mucho desnivel o de distancias diferentes, o puede que algún larga distancia, maratones de montaña… quién sabe.
-¿Qué estás haciendo ahora en el plano profesional?
Estoy trabajando como “Masseur" en el hotel de mi colega Jan Pyott. En suiza no te convalidan el título universitario hasta que certificas un nivel de B2 en alguna de sus lenguas oficiales, así que estoy estudiando para aprobar el examen a finales de año. Cuando tenga la convalidación del título, podré ejercer 100% como fisioterapeuta. Aparte de esto, sigo con otros proyectos paralelos que puede que sigan adelante o no, ya se verá. Suiza es un país de muchas oportunidades.
-¿Con qué te quedas de estos años como triatleta PRO?
Oh, no podría hacer una lista. Pero aparte de haber viajado a sitios que nunca hubiera imaginado, de vivir experiencias y aventuras, es, sobre todo, haber conocido a tanta gente especial que me ha inspirado, motivado y, sobre todo, me ha ayudado a llevar a cabo todas las cosas que he hecho y que quiero hacer. Jan y su mujer Justine, que, por ejemplo, me han dado la oportunidad de venir a este país y me están poyando en todo. La buena gente, la buena gente que te vas encontrado por el camino sin quererlo, se quedan allí y te las llevas para siempre. Te podría decir 40 nombres, como el de Ginés Díaz, el bonachón de César Villalba, Raúl Casañas, mi socio en XTERRA Andrés, y Laura, una crack. Y luego gente que no conocéis, gente que son GGEE en XTERRA y triatlón pero que son personas que tienen sus negocios y te cuentan lo que han currado para llegar hasta allí. Eso es lo mejor, ver a gente que te puede aconsejar y dar cátedra con sus propios ejemplos. Esto ha sido, en parte, lo que me ha llevado a tomar la decisión de dejar de competir.
-¿Qué te ha faltado –si piensas que te quedado algo por hacer o conseguir–?
Nada. Ojalá hubiera hecho algo más de dinero, pero creo que me lo hubiera gastado igual con XTERRA españa (se ríe). No, ha sido una etapa muy bonita de mi vida. No puedo quejarme y, cuando lo pienso, solo me vienen buenos momentos a la memoria.
-Llevas 4 meses sin pisar una piscina... ¿No lo echas de menos?
Yo, no mucho; mi espalda, un poco sí. Ahora ya lo voy teniendo todo un poco controlado por aquí. Volveré a nadar pronto.
-¿Sigues entrenando la bici y la carrera?
Sí. Hago un entreno al día. Un día, bici; y un día, carrera a pie. Este sitio es increíble para perderte. Creo que voy a empezar a correr largo a ver si me adapto y puedo hacer alguna maratón.
-¿Y volver como organizador o en otro ámbito del triatlón más allá de competir con dorsal?
Sigo teniendo la empresa Iron Heart Sports, con la que he organizado los XTERRA junto a Andrés. Está latente. Nos deben mucho dinero en Málaga y es también una de las razones, junto con el cambio de dirección de XTERRA Internacional, por lo que ya me he cansado de poner mi dinero en este pozo. Pero ahí está el trabajo hecho y la gente sabe que cuando van a un evento mío se van a ir flipandolo en colores. Si aparece alguna oportunidad con las condiciones adecuadas, no dudaré en volver a meterme a poner cintas de balizar, pero ahora mismo estoy muy cómodo en Suiza y no voy a estar rompiéndome la espalda como estos dos últimos años para que por un lado o por otro te acaben jodiendo.