Es el segundo número de la Revista Triatlón (y espero que sea el último) en el que la ausencia de competición por la crisis del Covid19 nos dificulta traer a un triatleta que ha obtenido algún resultado relevante en el último mes y cuya historia, ya sea en una competición concreta o en su trayectoria en general, sea interesante para compartir con los lectores.
Si el número pasado traíamos a esta sección "triatletas solidarios" que habían donado medios económicos o materiales para tratar de paliar los efectos de la crisis sanitaria, este mes os acercamos un triatleta singular cuyo mayor gesto de solidaridad durante estos meses ha sido regalarnos, como lo ha hecho durante toda su trayectoria, su conocimiento y experiencia única como triatleta, pero especialmente como ENTRENADOR. Su plataforma de entrenamiento, sus RRSS, su canal de Youtube se han inundado de recursos prácticos para triatletas confinados, pero sobre todo de sabiduría vital y deportiva.
Con vosotros, PABLO CABEZA
Pablo es un deportista forjado en el atletismo (2h:29 en maratón) que llegó al triatlón en 1995. En nuestro deporte encontró su mejor escenario en la larga distancia y alcanzó en dos ocasiones la consideración máxima de ser Finisher en Hawaii (1998 y 2007) y otras dos veces en el mítico Embrunman (2001 y 2005).
Paralelamente a su trayectoria individual, fue pionero del triatlón en Talavera (TriTalavera) y se formó como entrenador. Aunque entre sus pupilos figuran deportistas de renombre como el ciclista David Arroyo (2º en el Giro 2010) o el piloto Álvaro Bautista (Campeón del Mundo de 125cc en 2006), realmente la gran labor de Pablo como entrenador ha sido guiar, y no solo deportivamente, a cientos de triatletas que han soñado y conseguido sus sueños con un entrenador muy peculiar y único.
Pablo ha sido pionero en muchos aspectos del triatlón, desde crear su propia plataforma de entrenamiento, un blog imprescindible para los amantes del IRONMAN ("Agua, viento y tierra"), hasta sus famosos training camp de invierno en Gran Canaria, lugar en el que pasó de ser visitante ocasional a instalar un campamento vital y permanente tan cerca del paraíso que, a veces, lo toca con sus propias manos.
Pablo vive su dualidad de triatleta eterno y entrenador experimentado, con una intensidad y una pasión que contagia de amor al deporte y a la vida en general, a cualquiera que se para un par de minutos para leerlo. Por eso, él ve recursos donde los demás ven problemas, muestra agradecimientos cuando el resto se queja y transmite tranquilidad cuando los demás sufrimos impaciencia.
“El día de mañana, tomemos consejo de quienes hayan luchado, creado y resistido. De los que hayan “sido” y “estado”. Todo el mundo opina porque es gratis, pero es mejor hacer y conocer", escribió Pablo desde su blog (“Mi aportación desde la resistencia”) recientemente...
Gracias, Pablo, por ser inspiración, faro y mástil de tantos triatletas durante tantos años y hacerlo con tanta pasión.
Eres algo más que nuestro TRIATLETA DEL MES, tú eres la RESISTENCIA.