El triatlón es un deporte joven, pero ¿está madurando bien?

Clemente Alonso reflexiona sobre la creciente problemática del incumplimiento del 'no-drafting'.

Clemente Alonso

Grupos de triatletas durante el segmento de ciclismo del Ironman de Hawaii.
Grupos de triatletas durante el segmento de ciclismo del Ironman de Hawaii.

Hace dos años en el IM de Texas tuve un enganchón con el juez general de la prueba. Como ocurre a menudo en tantas pruebas de IM últimamente, se monta un tren de profesionales al “límite" de la legalidad. La norma dice que has de estar a 12m en línea (en el lateral del carril) y que si abandonas esa línea es para adelantar, para lo cual tienes 30" o de lo contrario estarás haciendo “bloc- king", también sancionable.

Hace lustros, cuando esto era un deporte aún más joven, se podía rodar relativamente en paralelo para evitar el drafting, si te echabas encima de otro triatleta, por ejemplo, por frenar más tarde o por ser más aerodinámico en bajadas, bastaba con abrirte. Ahora eso no es posible y no queda otra que frenar para no acercarte al de delante ni incurrir en el “blocking", aparte de tener que frenar si te adelantan. Al mismo tiempo, a la que aumenta la distancia con el de delante de 12m, el que va detrás de ti tiene derecho a adelantarte si lo hace en esos 30" mencionados con anterioridad. El resultado de todo esto desvirtúa totalmente la competición en los puestos de cabeza.

En esa carrera en Texas estuve toda la prueba intentando mantener más de esos 12m, tanto que por norma general eran más bien 15m, siendo, por tanto, constantemente adelantado por otros triatletas al ver que el hueco que yo dejaba era el doble que el que dejaban los demás (sí, el doble, hubo triatletas, algunos de renombre, circulando todo el tiempo a 6-8m sin que los sancionaran).

Sin embargo, formando todos una hilera larga, a veces en las frenadas se daba el fenómeno acordeón y sin querer me echaba encima de los de delante, como tantos otros, motivo por el que, creo, me cayó una tarjeta por drafting. Ese juez general, con el cachondeo que fue la bici, sólo nos sacó tarjeta por drafting a unos pocos, de menos renombre, motivo por el que tuve el enganchón con él (me puede frustrar que me saquen una tarjeta injustamente y que el juez se equivoque, es el factor humano, pero que no deshiciera todo el tren en carrera y “solucionara así" el problema, no era de recibo). Wiltshire, con el que hice prácticamente toda la natación y la bici, no podía creer que me hubieran sacado tarjeta por drafting siendo yo de los que más distancia dejaba.

Esto no es un alegato en favor de mi “pureza antidrafting", es sencillamente para ilustrar un problema que se viene dando en los últimos años a medida que el nivel medio en “Pro" ha ido aumentando y hay más densidad en puestos cabeceros. O eres un superciclista o es muy difícil salir de ese tren que se monta. Ya sea porque estratégicamente no es rentable, ya sea porque a 12m hay cierto ahorro en vatios (no hablemos ya de los 8m a los que van algunos con mejor o peor intención), si uno va a competir ha de estar en ese tren a lo que marca la legalidad.

El problema es que en carrera valorar cuál es la distancia legal varía mucho entre personas y a la que un deportista va a más metros que los demás (aunque su distancia sean los 12m legales), le van a adelantar por no ir pegado, relegando a puestos traseros, peores estratégicamente si hay cortes. No digo que todos vayan deliberadamente a 8m (algunos sí), digo que la percepción subjetiva varía. A veces la distancia entre líneas discontinuas ayuda de guía, pero otras veces queda para el “ojímetro" del deportista. Por tanto, o vas pegado o no compites porque te van echando para atrás (que es lo que me pasa a mí por norma general). La competición, por tanto, queda desvirtuada: el que respeta los 12m, que no es la norma, es relegado atrás por los que interpretan eso como mucho espacio (“se queda"), el que se deja caer del grupo deberá ir moviendo 15-20w más para ir al mismo ritmo (quien piense que esto es poco no tiene ni idea del tema) y lo mismo con esos “ubercyclists" que van solos por delante o recortando desde atrás, que han de poner esos vatios de más con respecto a buenos corredores que van escondidos.

Ya he comentado por aquí alguna vez que estaría muy bien que la distancia legal fuera de 20m, porque incluso si falla la percepción subjetiva y se va a 15m, los beneficios no serán tan notables; es quizá un motivo más para preferir pruebas de Challenge a las de Ironman: el segundo siempre se esfuerza más.

Hace poco vimos en Texas de nuevo unos tiempos espectaculares. En todos los grupos de edad y en los profesionales también. Luego vimos fotos también. No sé si esto que explicaba yo antes para los “Pros" acucia también a los grupos de edad, pues en realidad pelean por una plaza para Kona también, pero es que en grupos de edad iba más allá y pudimos ver pelotones y hasta alguna montonera como las del Tour, con bicis de contrarreloj, eso sí: auténticos “rebaños de cabras". Ese día “se batió el récord" de ironman. Por lo visto, al circuito de bici le faltaban un par de kms. Al principio, “trenecitos" aparte, se dijo que no había récord, a los dos días que sí. ¿Somos un deporte serio?

Llevo tiempo descartando algunas pruebas por la posibilidad de que esos trenes se monten porque, a fin de cuentas, yo voy a competir y uno quiere que la competición sea lo más justa posible y que sus esfuerzos de deporte individual (en el que todo el mundo se esfuerza en solitario y no en pelotones) se reflejen en la clasificación final. De la misma manera, a algunos de los deportistas que entreno les recomiendo que no vayan a ciertas pruebas donde hacer una carrera libre de pelotones va a ser imposible, porque tanto esfuerzo va a quedar en nada salvo, quizá, una foto en la que se les vea, frustrados, rodeados de triatletas porque no hay espacio para meter a 2.000 triatletas que salen muy pegados de la T1. Somos un deporte joven, pero ahora mismo creo que es el momento de hacer que éste sea más adelante un deporte adulto, serio y respetable...