El equipo olímpico de ciclismo en pista de Gran Bretaña ha usado en Tokio una nueva y revolucionaria bicicleta diseñada y fabricada por Hope y Lotus.
Denominada Hope HB.T, tenía una horquilla súper ancha (8 cm) con un manillar integrado. Según Hope y Lotus, la bicicleta era aún más aerodinámica una vez que el ciclista se acoplaba en ella para formar una sola unidad.

Ahora, ya sin la participación de Lotus, la firma británica Hope Technology ha creado una versión de la HB.T apta para la carretera, creando la que posiblemente sea la bicicleta de contrarreloj o 'cabra' de aspecto más 'salvaje' del planeta.

Para el prototipo que podemos ver en las imágenes que acompañan esta publicación, han utilizado el mismo material de fibra de carbono de alto módulo que se usa en las bicicletas de pista.
"La atención se centró en crear una máquina que respondiera en gran medida a las aportaciones del ciclista, maximizando la eficiencia de la bicicleta", explica a Bikerumor Sam Pendred, el diseñador de la bici.
"Queríamos hacer que la bicicleta de pista fuera un poco más fácil de usar, con algunas marchas y un par de frenos", aclara Pendred, quien, junto a su equipo de trabajo, aprovechó los meses más duros de la pandemia para desarrollar esta cabra revolucionaria que tiene la aprobación de prototipo de la UCI.
Para acelerar el proceso, Hope decidió producir por cuenta propia la mayoría de las piezas. Así, sustituyeron todos los componentes de titanio impresos en 3D de la HB.T con alternativas de carbono o aluminio CNC.

El mayor desafío fue el cableado. Hope fabricó una pinza de freno de dos pistones totalmente personalizada para que funcionara con la horquilla en la bicicleta TT; la manguera y los accesorios quedan ocultos internamente dentro de la salida.

Eso sí, barata no es. “Actualmente estamos buscando formas que reduzcan el coste de las bicicletas para poder ofrecerlas a un precio mucho más asequible. Con una complejidad inevitable en algunos de los componentes personalizados y el deseo de mantener el grado de carbono utilizado en las bicicletas olímpicas, creemos que puede estar entre los 11.500 y los 17.000 euros".
SOBRE HOPE
Hope Technology comenzó su andadura a finales de la década de 1980 como una empresa subcontratada que fabricaba herramientas y accesorios para las numerosas empresas aeroespaciales de la zona de Barnoldswick, en Inglaterra. En 1989 comenzaron a fabricar frenos de disco para las bicicletas de montaña de nuevo desarrollo. Inicialmente para uso personal de los propietarios Ian Weatherill y Simon Sharp, pero rápidamente se dieron cuenta de que estos frenos podían venderse como un producto por derecho propio.
Dado que los frenos de disco eran una idea tan novedosa en una bicicleta, decidieron comenzar a fabricar otros productos de bicicleta más comunes, el primero de ellos fue un buje delantero. Éstos comenzaron a venderse a través de minoristas en el Reino Unido y también se mostró interés en muchos países de todo el mundo.
Durante los años siguientes, se agregaron muchos más productos a la gama y en 2000 se tomó la decisión de detener todos los trabajos de subcontratación y concentrarse exclusivamente en productos para bicicletas.
Hope ahora fabrica casi todas las piezas de una bicicleta, incluidos bujes, frenos, potencias, soportes inferiores y luces. La única parte importante que queda por desarrollar es el cuadro, aunque ya están en ello. Todas las piezas se fabrican con orgullo en la fábrica de Hope, en Barnoldswick, que es una verdadera instalación de vanguardia. Tienen casi 100 empleados operando durante las 24 horas, los 7 días de la semana.
Hope exporta alrededor del 50% de su producción a más de 40 países. Tratan directamente con minoristas en el Reino Unido, Francia, Alemania, Austria, Bélgica y los Países Bajos (emplean personal de habla francesa y alemana), luego tienen distribuidores en muchos otros países. Sus componentes tienen una excelente reputación internacional tanto por su calidad como por su fiabilidad.