¿Cómo se monta un sistema tubeless?

Te contamos cómo montar un sistema tubeless en tu bici en poco más de quince minutos.

Antonio del Pino

¿Cómo se monta un sistema tubeless?
¿Cómo se monta un sistema tubeless?

¿QUÉ ES UN TUBELESS?

Es un neumático de estructura aparentemente convencional con la particularidad de que está diseñado y producido para ser montado sin necesidad de usar cámaras. Esto es posible al montarse en una llanta estanca (bien de serie o bien porque previamente la hemos “tubelizado" con un kit) que, gracias a que el talón lateral del neumático tubeless es más amplio y que el interior de neumático está sellado con butilo, consiguen que el aire quede aislado sin ningún tipo de fuga.

Te contamos todo lo que tienes que saber sobre este sistema en este artículo.

 

¿CÓMO SE MONTA?

1. Primero hay que limpiar la llanta para poder pegar con garantías la cinta adhesiva de doble cara y el fondo de llanta de plástico amarillo que taparán los agujeros de los radios. Aquí no hay más truco que ser limpio y cuidadoso, pero eso sí, es imprescindible utilizar un fondo de llanta de la medida de cada llanta, tanto en diámetro como en anchura.

El fondo de llanta debe entrar muy ceñido para que después no se levante fácilmente, y debe cubrir completamente el fondo de la llanta. Si se utiliza un fondo de llanta más estrecho casi con toda seguridad, al cambiar de cubierta la próxima vez, el fondo se retorcerá y levantará, arruinando el sellado.

2. Una vez pegado el fondo de llanta colocamos la válvula. Debemos cerciorarnos de que la válvula y en concreto su junta de goma, asiente perfectamente en la medida del agujero de la llanta que queramos convertir. Las válvulas suelen venir con 3 tipos de juntas de goma intercambiables, a elegir según el agujero de la llanta a tubelizar, y hay una cuarta junta para agujeros de llanta extra grandes que se vende por separado para casos excepcionales.

La válvula nunca debe apretarse con herramientas, la fuerza de la mano es sufi ciente si está bien hecho. Un truco recomendable es aplicar una gota de aceite en la rosca de la tuerca de la válvula para evitar que el sellante, que en ocasiones rezuma por esta zona, pueda dejarla tan pegada que después en ruta nos impidiera quitar la válvula si fuera necesario.

3. Montamos la cubierta, mojando previamente la cubierta y la llanta para ayudar al talonado posterior. Lo mejor es utilizar un pulverizador o una brocha. Y lo más importante, utilizar agua sin jabón (porque puede afectar a las propiedades del sellante) añadiendo la dosis de líquido sellante correspondiente según la medida de la rueda.

Damos presión hasta que talona el conjunto. Si se utilizan válvulas desmontables hay un truco que ayuda muchísimo a talonar: es dar presión sin colocar el obús en la válvula, de manera que entra más caudal de aire de golpe y es más fácil talonar. Una vez talonada la rueda es cuestión de maña retirar el compresor, taponar rápidamente con el dedo y acto seguido quitar el dedo para colocar el obús.

Sí, pierde presión, pero con una mínima práctica os saldrá a la primera por muy difícil que pueda parecer. Ya solo queda mover la rueda en todos los sentidos para que el líquido sellante se reparta por todo el interior y selle perfectamente. Es un proceso que, dependiendo de cada modelo de cubierta, por su tipo de goma y  construcción, puede llevar entre escasos segundos o hasta un par de días. Lo normal es que los primeros minutos sean cuando pierda más presión, y lógicamente es cuando hay que mover más la rueda hasta que comprobamos que deja de tener pérdidas significativas.

Un buen truco es salir a rodar unos minutos, para que la cubierta se asiente correctamente en la llanta, y si tiene poros semicerrados que estos se abran para que el  sellante pueda entrar y sellarlos definitivamente. Pero si al día siguiente la rueda amanece en el suelo no nos  asustemos, volvemos a dar aire y repetimos la operación. Posiblemente algún poro se abrió y dejó escapar el aire, pero en cuanto volvamos a hinchar y selle, asunto solucionado.

¿EL SISTEMA TUBELESS NECESITA MANTENIMIENTO?

Sí, como cualquier rueda, debe vigilarse su presión cada vez que salgamos a rodar. Es vital que llevemos la presión adecuada, porque como hemos dicho anteriormente, la presión es la que sustenta el sistema tubeless, y en ello va nuestra seguridad.

Mientras que la rueda tenga líquido sellante en su interior no debe mostrar pérdidas de presión significativas, pero si observamos que la rueda pierde presión todos los días quiere decir que no debe quedar líquido; ha llegado la hora de añadir una dosis. Recomiendo añadir un poco de sellante cada dos meses de media, aunque este plazo puede reducirse o ampliarse bastante dependiendo de los factores anteriores. Personalmente, prefi ero llevar la dosis mínima pero reponer frecuentemente. Puede parecer más latoso, pero me aseguro de que siempre llevo líquido fresco en buen estado.

¿Y SI PINCHO UN TUBELESS?

Realmente es casi imposible pinchar un tubeless que lleve un buen mantenimiento de líquido y presión. Del 95% de los pinchazos ni te enterarás, porque serán sellados automáticamente. Otra cosa son llantazos, rajas y cortes que desgarran la goma y que en ocasiones el líquido no podrá sellar. Pero siempre tenemos la alternativa de montar una cámara y seguir nuestra ruta, porque son sistemas perfectamente compatibles.

Eso sí, revisa la cubierta porque podrías llevar varios pinchos clavados y al colocar la cámara sin quitarlos podrías arruinarla. Pero una recomendación solo en caso de pinchazo crítico o raja, cuando vemos que no sella rápidamente, es dejar que salga un poco de aire para que baje la presión de la rueda. Con bajas presiones el sellante trabaja mejor, y una vez reparado, cuando el sellante solidifica y deja de salir aire, dar de nuevo un poco de presión, sin llegar al máximo para al menos regresar a casa tranquilamente y allí valorar cada caso concreto.