"¡Se buscan voluntarios!"... Así reza el anuncio publicado en el West Hawaiian Today. Porque a siete días para que se dé el cañonazo de salida en Kona para el Campeonato del Mundo IRONMAN: "No hay suficientes voluntarios para el gran evento".
Para el regreso del Mundial a 'la meca' tras dos años de ausencia por la pandemia y con 5.000 triatletas en la línea de salida, se necesitan 8.000 voluntarios, pues esta edición, precisamente por el incremento de inscritos, se desarrolla en dos jornadas, el jueves 6 y el sábado 8 de octubre. Por tanto, la organización reclama urgente y encarecidamente ayuda para, al menos, acercarse a esa cifra de 8.000. Una tarea complicada, ya que los residentes de Kona, como contábamos en las últimas horas, se mueven entre la indiferencia y la hostilidad.
Menos voluntarios... menos avituallamientos
La primera consecuencia de la falta de voluntarios es evidente: habrá menos estaciones de avituallamiento y, por tanto, más distanciadas.
"En el segmento de ciclismo, los puestos de asistencia estarán cada 16 km en lugar de cada 11 km, como antes. En el maratón, las distancias se han incrementado de 1,6 km a 2,5 km. Esto supone un hándicap para los triatletas más lentos. Y en en esta ocasión hay más que nunca”, ha explicado en las redes sociales Brad Culp, redactor de Triathlete Magazine.