Sebastian Kienle fue noticia hace unos meses cuando anunció que daría por finalizada su carrera como profesional al término de la campaña 2023. Es decir, el triatleta alemán, de 37 años, se concedió dos temporadas más en la élite, aunque dando prioridad a la primera. La segunda y última, ya el año que viene, será más bien una despedida, sin el nivel de auto-exigencia que sí se ha impuesto para este 2022.
Con este planteamiento se presentó el pasado 7 de mayo en el Campeonato del Mundo IRONMAN de St. George (Utah, EE.UU.), competición que conquistó en Hawaii en 2014. En esta ocasión, Kienle se tuvo que conformar con la 14ª posición, muy alejado del ganador, el noruego Kristian Blummenfelt.
"Yo también estoy decepcionado. Y con un par de resultados muy decepcionantes en los últimos dos años, me pregunto: ¿Debería simplemente bajar mis expectativas? ¿Probablemente lo haría más fácil? Creo que NO bajaré mis metas. Tal vez no sea posible para mí ganar otro título mundial, pero sé que todavía tengo un top5", decía después de aquella prueba el germano, que quería resarcirse en el Challenge de Roth que se disputa el próximo domingo 3 de julio, con un cartel de muchos quilates: Jan Frodeno, Patrick Lange, Sam Long, Maurice Clavel, Andi Böcherer...
Pero, de nuevo, 'Sebi' tendrá que esperar. El Covid y una reciente caída durante un entrenamiento de bici le dejan fuera de la carrera. Así lo ha explicado en un vídeo que ha publicado en las redes sociales:
Está bien, este es probablemente el décimo intento, pero supongo que no hay una manera fácil de decirlo. No haré el Challenge de Roth el próximo fin de semana. Obviamente, es una decisión muy difícil para nosotros dado que sé muy bien que esta es una de las últimas oportunidades de competir en un escenario como Roth, con una lista de salida como la que hay.
La razón, francamente, es que no estoy en forma. Cogí el Covid en Estados Unidos, antes o después de la carrera en St. George, aún no está claro.
Pero lo que está bastante claro es que me costó casi tres semanas de buen entrenamiento y todavía estoy recuperándome un poco. Creo que estaba en una buena línea, pero hace unos cinco días me caí de la bicicleta. Nada realmente importante, solo un poco de piel que quedó en la carretera y algunos moretones.
Pero, de nuevo, me llevó de tres a cuatro días volver a entrenar bien, por lo que he decidido no competir. Y sé cuál va a ser la pregunta: ¿Por qué no? Solo inténtalo... y a ver qué pasa: compensar la falta de condición física con una dosis extra de motivación.
Pero el problema es que si haces algo así, tienes que estar 100% convencido de que tu cuerpo puede responder. Yo no estoy 100% convencido. Entonces vas a arriesgar tu salud, lo cual no es una buena idea. Sigue siendo un triatlón de larga distancia y hay que tratarlo con cierto respeto.
La otra opción, por supuesto, hubiera sido simplemente disfrutar de la carrera, empaparse de todo el ambiente, tomar una cerveza en el puesto de avituallamiento y chocar los cinco con la multitud. Para ser honesto, todavía no estoy listo para eso, todavía estoy muy motivado para competir por las victorias y vencer a otros muchachos.
Si estuviéramos ya en 2023, estaría en la salida y haría que fuera un día más fácil y disfrutaría de la atmósfera, pero aún no estoy listo para hacerlo.