El triatlón está de luto. Diego Paredes ha sido hallado muerto en su domicilio de Plasencia este miércoles por la noche. El triatleta extremeño, natural de Coria, ha fallecido a los 42 años como consecuencia de una larga enfermedad que arrastraba, aunque nadie esperaba tan prematuro y dramático desenlace. La triste noticia ha sido confirmada este jueves por sus más allegados.
Dedicado al triatlón durante dos décadas, Diego destacó en media y larga distancia. Conquistó el Triatlón Vitoria de distancia full en 2015. Esa campaña también ganó el Triatlón de Buelna y el Triathlon Cabo de Gata-Níjar; y fue 3º en el Triatlón Madrid KM0.
Un años antes, en Kona, había acabado en el 8º puesto de su grupo de edad el Campeonato del Mundo IRONMAN, en 9h11'. Y en 2013 ya había ganado el IRONMAN de Lanzarote también en su franja (35-39), siendo 10º de la general.
En 2016 terminó 2º en el Pamplona Triathlon y 3º en el de Bilbao.
Diego, licenciado en Ciencias de la Actividad Física y del deporte y entrenador superior de natación, triatlón y atletismo, era el perfecto ejemplo de triatleta que se movía entre el profesionalismo (por dedicación y resultados) y el amateurismo, al no poder vivir de este deporte y, por tanto, tener que compatibilizarlo con un trabajo. Su forma de ser, su carisma y el espíritu didáctico con el que le gustaba transmitir sus experiencias en este deporte, le habían convertido en uno de los triatletas más queridos y respetados del panorama nacional.
Diego ha sido colaborador habitual de la Revista Triatlón hasta el último número, en el que nos dejaba este interesante artículo: 'Las 9 claves del buen nadador'. Y fue portada del número 45.
DEP, Diego...