Sam Long es uno de los triatletas de moda. A sus 28 años, el estadounidense ocupa la 3ª plaza del ranking mundial de la PTO por méritos propios. También es 3º en el escalafón del T100 Triathlon World Tour.
En lo que va de temporada, Long ha ganado el IRONMAN 70.3 de Pucón (Chile); fue segundo en el de Oceanside (EE.UU.); también ha conquistado la plata en dos pruebas del T100 Triathlon World Tour, tanto en Miami (EE.UU.) como en Singapur; se hizo con el triunfo en el IRONMAN 70.3 de St. George (EE.UU.), reeditando la victoria que ya logró en 2023 en esta misma competición; en el evento T100 de San Francisco terminó en la 8ª plaza y en el de Londres de finales de julio, la 11ª.
Pero Sam es inconformista por naturaleza. Después de competir en la capital británica, se quedó en Europa y decidió competir en el IRONMAN de Frankfurt del pasado domingo con el objetivo de buscar su clasificación para el Campeonato del Mundo IRONMAN Masculino que se disputará en Hawaii el 26 de octubre (esta campaña los hombres compiten por el Mundial en Kona; y las mujeres, en Niza).
Yo, Yo, Yo no estará en Hawaii
Sin embargo, echaremos mucho de menos en Kona al bueno de Long, porque las cosas no le salieron como él esperaba en Frankfurt y se quedó muy lejos de las 6 primeras posiciones que otorgaban un billete para el Mundial de Hawaii.
En una competición con mucho nivel (hasta 29 triatletas bajaron de las 8 horas; 19 lo hicieron en menos de 7h50), ya de la natación salió muy retrasado. Y, en esta ocasión, el estadounidense no pudo llevar a cabo su remontada 'marca de la casa' sobre la bici y en la carrera a pie. Al final, acabó en el puesto 22º, en 7:51:25 (Kristian Blummenfelt, el ganador, lo hizo en 7:27:21).
Como siempre, el carismático Sam Long intenta ver el vaso medio lleno. Ésta es la valoración que ha dejado en redes sociales de lo que ha sido su último cartucho para lograr un slot para Hawaii.
“Fallas el 100 % de los tiros que no intentas” (Wayne Gretzky)
Estoy orgulloso de haber tenido el coraje de venir y probar en el IRONMAN de Frankfurt.
Al final, no lo conseguí. Sin embargo, para mí hay muchos aspectos positivos; de hecho, vi algunos grandes pasos en la dirección correcta en esta distancia, saqué mi picazón del Ironman y no me arrepiento, ya que me concentro completamente en el T100 el resto del año.
¡La multitud fue increíble!
Felicitaciones enormes a todos los que terminaron.