Natación

¿Te has estancado en el agua? ¿Y si en invierno te dedicas sólo a nadar?

¿Y si por un invierno priorizamos por encima de todo el segmento de natación? ¿Por qué no aprovechar y dedicar todo el esfuerzo y tiempo a entrenar la natación?

Maribel Blanco

3 minutos

Plan entrenamiento natación

Debido a su juventud, nuestro deporte está en constante evolución. Lo fácil es pensar en el material, pero hay muchos más factores dónde se están produciendo cambios. Pensemos sino en el nivel de reconocimiento social del triatlón desde fuera. También hay que mencionar el crecimiento de los clubes y el nivel de los servicios que están ofreciendo o el papel de los organizadores y las marcas que están atrayendo.

Y sin embargo, tanto movimiento en pos del progreso no significa que todo cambie por igual. De hecho, encontramos que hay cosas que permanecen como si fuera el primer día. De entre ellas, hay una que destacar por encima de las demás: el reto que plantea el segmento de la natación tanto a los más nóveles, como a los que ya se sienten triatletas de pleno derecho, pero que no consiguen evolucionar en el primer parcial tanto como les gustaría.

Con el paso de los años, el triatleta ha podido acumular metros y metros. A pesar de ello, las marcas permanecen estancadas o con un mínimo progreso que pueden llevar a la desmotivación y dar por perdida la batalla antes de tiempo.

Invariablemente las culpas recaen sobre “la técnica" y el otro gran mantra de la natación, “el problema es que no cojo agua". Si queremos algo más objetivo obtendremos algo así como “todo el mundo me dice que llevo el codo bajo" y para terminar de arreglar las cosas, aquello de “Ay, si hubiera  nadado de pequeño!"

Y efectivamente estas son las posibles razones. Malos aprendizajes, pocos o en un momento inadecuado, falta de reconocimiento de las sensaciones en un medio no “humano". Técnica no adaptada a las características individuales… Hemos ido aportando posibles soluciones parciales a cada uno de estos aspectos. Os hemos transmitido lo importante que es jugar en el agua, trabajar la técnica, no nadar por nadar, hacer nados conscientes, sentir el  agua. Métodos de entrenamiento para mejorar diferentes cualidades, cómo hacerlo, con quién y con el material adecuado para cada cosa…

La experiencia me dice que a cada persona le vale una solución y no otra. Encontrarla es como la búsqueda del vellocino de oro!. Y lo peor es  encontrarnos con la pregunta que más miedo nos da: “¿HABRÉ LLEGADO A MI LÍMITE? ¿YA NO PUEDO MEJORAR MÁS?"

Antes de negarnos la posibilidad de ser mejores nadadores hay que encarar el problema de tú a tú. Es el momento de dar un paso verdaderamente distinto y apostar poniendo toda la carne en el asador: invierte este invierno en el agua.

Os propongo que aprovechéis estos meses invernales prácticamente solo para nadar. A ver, fuera hace un frío considerable. Las condiciones para entrenar en bici son pésimas. La carrera a pie probablemente haya que realizarla a oscuras o pisando escarcha. Nada imposible para un triatleta pero, ¿y si por un invierno priorizamos por encima de todo el segmento de natación? ¿Por qué no aprovechar y dedicar todo el esfuerzo y tiempo a entrenar la natación?

Sí, os propongo que durante 3 meses el peso de toda vuestra preparación recaiga sobre la natación. Esto se traduce a entrenar entre 4-6 sesiones de agua, según la semana, con un entrenador “encima", con compañeros que entrenen con vosotros y, claro, con todos los medios tecnológicos que podáis añadir a este mega ciclo monográfico de natación.

Si la decisión empieza a tomar forma en tu cabeza vas a necesitar unas directrices muy claras. Léelas con toda atención porque son parte del camino a seguir:

  • Busca a un entrenador que nos dirija el proceso y corrija en el día a día.
  • Entrena descansado, que sea la primera sesión del día.
  • Actitud positiva en cada entrenamiento.
  • Busca la paciencia y perseverancia debajo del sombrero.
  • Cambia el triatlón por la natación durante unas semanas.

Lo ideal sería entrenar durante 3-4 meses con un equipo de natación master. Esta opción es difícil. Seguramente sólo será válida para los triatletas que tienen cierto nivel. Además debes contar con la buena disposición del entrenador de natación que quiera prestar ese esfuerzo extra a un triatleta que no compite en su deporte. La opción más real, para la mayoría, será seguir nadando con tus compañeros de club de triatlón, con tu entrenador y añadir el resto de sesiones por tu cuenta.