Su pasado de nadador le permite lanzar un reto a todos los que, seguramente, serán sus rivales en el Campeonato del Mundo de Hawaii de este año: quiere salir el primero del agua. Y no se conforma con eso. El último ganador del Ironman de Mallorca, trabajador (no vive del triatlón) y padre de familia, se entrena muy duro, sacando tiempo de donde no lo hay, para llegar lo más lejos posible...
Su ruta ya está trazada: el 13 de mayo, el 70.3 de Alcudia; una semana después, el Ironman de Lanzarote; y el 9 de julio, el Ironman de Frankfurt. Tiene 2000 puntos de la victoria en Mallorca la temporada pasada. Le restarían entre 1300 y 1500 para estar dentro... En palabras del mismo Carlos: "Es factible"...