Los dos últimos campeones del mundo, Vincent Luis (2019) y Mario Mola (2016, 2017 y 2018), han vuelto a protagonizar en la Copa del Mundo de Banyoles, que se ha disputado este sábado, un intenso duelo, después de la Gran Final de las Series Mundiales de la semana pasada en Lausana (Suiza).
El triatleta francés se ha impuesto al balear en un disputadísimo esprint en los últimos 100 metros. La medalla de bronce fue para el húngaro Bence Bicsák.
La carrera, de formato sprint, se ha desarrollado sin sorpresas. Ya en la carrera a pie, Mola y Luis, como era de esperar, sí han marcado diferencias nada más salir de la segunda transición. Los dos amigos y compañeros de entrenamiento han completado codo con codo este último 5.000, hasta el emocionante desenlace que ha caído del lado del galo.
Antonio Serrat finalizó en el puesto 13º. Y los catalanes Genis Grau y Jordi García fueron 27º y 33º, respectivamente.
En la categoría élite femenina, la victoria fue para la alemana Laura Lindemann, por delante de la estadounidense Tamara Gorman y la doble campeona del mundo Flora Duffy. Las tres han liderado la prueba desde el primer momento, integradas en un grupo de nueve triatletas, entre las que estaban las catalanas Carolina Routier y Sara Pérez, formado después de la primera transición. Posteriormente, en la carrera a pie, se marcharon en solitario y se jugaron los puestos de podio.
Carol, que corría por primera vez en casa tras el grave atropello que sufrió hace un año y medio, ha sido la primera clasificada del equipo español, con un meritorio 8º. Se ha mostrado muy satisfecha de este resultado y ha asegurado que el apoyo del público le ha dado la fuerza que necesitaba para seguir el ritmo de la carrera, confirmando que continúa en la lucha por la clasificación olímpica para Tokio 2020. Sara Pérez ha terminado 10ª.