El Ironman Western Australia que se disputó este sábado en Busselton (Australia) terminó convertido en un duatlón. Según The West Australian, los miembros del servicio de salvamento localizaron un tiburón a unos 600 metros de la costa a las 5:40 de la mañana. Poco después, la organización anunciaba a través de las redes sociales que se suspendía el sector de la natación.
Hay que recordar que en el Ironman 70.3 de Busselton del pasado mes de mayo ocurrió lo mismo. La presencia de un tiburón en las inmediaciones de la zona por donde tenía que desarrollarse el segmento de la natación obligó a la cancelación del mismo, en este caso, cuando ya había transcurrido parte de la prueba y muchos triatletas estaban todavía en el agua.
Así pues, la competición arrancó directamente con los 180 kilómetros del tramo de bici. El neozelandés Terenzo Bozzone (7:12:31), que está cuajando un gran final de temporada, y la australiana Melissa Hauschildt (7:52:05) se llevaron la victoria en una prueba con casi 1.800 triatletas en liza.
A pesar del contratiempo, el gobierno del estado seguirá apoyando el evento, por lo menos, tres años más, ya que reporta unos ingresos de más de 8 millones de dólares y se lleva celebrando desde 2004.