Tamara Gómez se colgó la medalla de bronce en el Europeo de Triatlón en distancia sprint, disputado este sábdo en Kazán, después de acabar tercera, a 34 segundos de la ganadora, la suiza Julie Derron. Tamara realizó una gran actuación, en la temporada de su reaparición después de diferentes lesiones y tras imponerse en el pasado Campeonato de España, disputado en Roquetas de Mar.
Gómez concluyó la prueba con un tiempo de 59.23, por 58.49 de la suiza, y 59.11 de la checa Petra Kurikova, con 59.11. Xisca Tous, la otra española participante, acabó en el puesto duodécimo, a 1.43 de la ganadora.
En la prueba masculina, la victoria fue para el británico Gordon Benson, con un tiempo de 52.03, seguido de su compatriota Samuel Dikinson. El primer español fue Jordi García, octavo, a 1.04 del ganador. Por su parte, Alberto González, no pudo estar con los mejores y se tuvo que conformar con el duodécimo lugar, a 1.25 de Benson.
2015 había sido el año de su consagración definitiva como triatleta tanto a nivel nacional como internacional... Tamara Gómez se proclamó campeona de España de Distancia Olímpica (fue 2ª en 2014 tras Miriam Casillas) y de la Copa del Mundo de Mooloolaba (Australia). Sin embargo, en 2016, una fractura de vértebra la dejó en el dique seco toda la temporada. Y en 2017, cuando empezaba a ver la luz, recibió otro "puñetazo" en la cara –así lo definió la propia Tamara–. Unas molestias en los gemelos empezaron a "darle la lata" cuando estaba entrenando en Nueva Zelanda. Después de “volverse locos" intentando descubrir el problema –algo parecido a lo que le sucedió con la fractura de vértebra un año antes–, por fin dieron con él: síndrome de atrapamiento de la arteria poplítea, una dolencia que necesitó de cirugía en las dos piernas.
Ahora, después de las dos operaciones y de un largo proceso de recuperación y rehabilitación, Tamara ha vuelto a lo grande. Como nos dijo en una entrevista reciente: "Nunca pensé en dejarlo; no quería que una piedra en el camino decidiera por mí"...