La ola de calor que está azotando gran parte de Europa durante estos días está obligando a los organizadores de eventos deportivos que se desarrollan al aire libre a tomar las medidas de precaución oportunas, sobre todo si se trata de pruebas que ponen al límite a los participantes, como es el caso de los Ironman. Ante semejantes circunstancias, se reabre el debate sobre si sería conveniente o no suspender directamente las competiciones...
Francia y Alemania también están sufriendo temperaturas extremas. Y este domingo acogen el Ironman de Niza y el Ironman de Frankfurt, respectivamente. La organización de este último ha modificado ciertas partes del recorrido del maratón final para que haya más tramos de sombra, pero, en principio, mantiene las distancias: 3,8 km de natación, 185 km de bici y 42,2 km de carrera a pie. Para las horas centrales del día se anuncian temperaturas de hasta 38 grados.
Los organizadores del Ironman de Niza, en cambio, sí han recortado el recorrido tanto del segmento de ciclismo como el de carrera a pie. Según las previsiones, en la capital de la Costa Azul se alcanzarán los 32 grados, con un alto índice de humedad.
"Debido al fuerte calor y las alertas por picos de contaminación, la prefectura de los Alpes-Marítimos nos ha pedido que respondamos con algunas medidas para mantener la celebración de la prueba.
Después de trabajar duro, el Ironman de Niza 2019 tendrá lugar este domingo 30 de junio en un formato recortado. En efecto, para la salud de los voluntarios y de nuestros atletas, las distancias serán ahora de: 3,8 km de natación, 152 km de ciclismo (2000 metros de desnivel positivo) y 30 km de carrera a pie (3 vueltas).
El domingo será un verdadero desafío deportivo para vosotros, así como para todos nuestros voluntarios, que van a desafiar las condiciones meteorológicas para ofreceros una aventura inolvidable", reza el comunicado que ha emitido la organización.