Aunque es cierto que en el momento de su aparición generaron un encendido debate y los entes oficiales encargados de establecer las normas tuvieron que ir manejando la nueva situación sobre la marcha, ahora el asunto parece estar bajo control.
Por ejemplo, IRONMAN, para este 2025, tiene muy clara su propia reglamentación sobre las 'zapatillas mágicas'. En las últimas horas ha sacado su particular 'lista negra', calzado para la carrera a pie que no se permitirá en ninguno de sus eventos, incluidos ambos mundiales: el masculino de Niza y el femenino de Kona.
Así, no se podrá competir en pruebas IRONMAN con zapatillas con un grosor de suela de más de 40 mm y/o con más de una placa de carbono, siguiendo la pauta que marca World Athletics, la Federación Internacional de Atletismo.
La 'lista negra'
Adidas: Adizero Prime X / Adizero Prime X Strung / Adizero Prime X 2 Strung
Asics: SUPERBLAST / Novablast 4 / Nova Blast 5
New Balance: FuelCell SuperComp Trainer
Saucony: Kinvara Pro
¿Y qué pasa en pruebas Challenge?
En principio, la franquicia Challenge seguiría permitiendo a los triatletas notables licencias en lo que al uso de las 'zapas mágicas' se refiere.
De hecho, su prueba fetiche, el Challenge de Roth, incentiva económicamente a los participantes para que intenten batir el récord del maratón... sin mirar el calzado que utilizan.
¿Y los GGEE?
Atendiendo a las explicaciones de IRONMAN, los triatletas que compiten en categoría de Grupos de Edad también estarían sujetos a las mismas limitaciones. Es decir, no se podrá competir en pruebas IRONMAN con zapatillas con un grosor de suela de más de 40 mm y/o con más de una placa de carbono.
“Los triatletas están sujetos a un control aleatorio de sus zapatillas antes, durante o después de cualquier carrera. En el caso de una zapatilla que no pueda identificarse, se deberá enviar la correspondiente información (incluso la propia zapatilla) a la sede de World Triathlon (Federación Internacional de Triatlón) para su verificación dentro de los siete días posteriores a la carrera. En los resultados oficiales se agregará la nota Resultado bajo revisión a los triatletas cuyas zapatillas estén siendo chequeadas. Si se confirma que la zapatilla es legal, se eliminará la nota. En cualquier otro caso, el triatleta será descalificado”, apuntan desde IRONMAN.