En el Maratón Internacional de la ciudad de Xuzhou, ciudad de la provincia china de Jiangsu, que se disputó el pasado viernes y en el que participaron hasta 22.000 corredores en las tres pruebas que acogía –maratón, medio maratón y 7 km–, se vivieron varias situaciones lamentables. En las redes sociales se habla de episodios "vergonzosos". Y, desgraciadamente, estas actitudes, más que antideportivas, escandalosas, se están convirtiendo en una tendencia cada vez más preocupante en muchas carreras que se organizan en China.
El caso más llamativo en Xuzhou fue el de una corredora que usó descaradamente una bicicleta alquilada de color verde para cubrir algunas partes del recorrido, a pesar de las advertencias de los voluntarios. Acabó en 5 horas, 38 minutos y 36 segundos. Los organizadores no le permitirán participar en la carrera nunca más. Además, la 'corredora', por llamarla de alguna manera, se enfrenta a una sanción de por vida que seguramente le imponga la Federación de Atletismo de China.
Pero hubo más. Los voluntarios han denunciado casos de saqueos por parte de algunos espectadores, que se llevaron cajas de plátanos y botellas de agua del avituallamiento ubicado en distintos puntos de la ruta. Por ejemplo, en algunos vídeos que están circulando por las redes sociales, se aprecia el comportamiento incivilizado de una mujer del público, discutiendo con los voluntarios porque quería coger una cajas de refrescos. Y una vez terminada la carrera "se lo llevaron todo", aseguran los voluntarios.