La avería, que se produjo hace diez días en una de las compuertas del azud del Ebro, ha obligado a suspender todas las actividades acuáticas programadas en ese tramo del río durante el verano. La más importante es el Triatlón de Zaragoza, previsto para el próximo domingo 16 de julio. Los organizadores de la prueba, que cumple su tercera edición, están trabajando para aplazar el evento hasta el fin de semana del 30 de septiembre y el 1 de octubre. Para ello, necesitan la aprobación del Ayuntamiento de Zaragoza y, sobre todo, que la avería ya esté solucionada para esa fecha.
La idea es que el triatlón, que el año pasado reunió a más de 400 deportistas, se termine disputando a pesar del importante contratiempo que supone modificar las fechas a menos de un mes para su celebración. Cuando se tome una decisión definitiva, será comunicada oficialmente a todos los triatletas participantes, a los que la organización ya ha transmitido que pueden solicitar la devolución íntegra de su inscripción si así lo desean. Hasta la fecha se habían apuntado 170 deportistas.
El recorrido habitual del Triatlón de Zaragoza arranca precisamente en el azud de Vadorrey, donde los participantes completan un trayecto de 750 metros en una vuelta. El circuito continúa con la transición hacia el tramo ciclista, de 20 kilómetros, para terminar con la carrera a pie, de otros 5.
Desde la Confederación Hidrográfica del Ebro aseguran que "está prohibido navegar a menos de 200 metros del azud", lo que hace totalmente imposible la disputa de la carrera sin modificar el recorrido, algo que la organización considera inviable porque reduciría notablemente los estándares de calidad deseados.
El Ayuntamiento de Zaragoza, que todavía no ha comunicado cuándo estará reparada la avería, ha convocado este jueves una reunión con todos los clubes afectados.