Las pintadas en las carreteras forman parte del decorado habitual de una carrera ciclista. Sin embargo, algunos graciosos no se dedican a poner el nombre de sus corredores favoritos para insuflarles ánimos, sino que dibujan penes, claramente visibles en las tomas aéreas de la retransmisión televisiva de la carrera que siguen cada día millones de personas en todo el planeta.
Pero en el Tour de Francia, donde se cuida hasta el más mínimo detalle, han tomado cartas en el asunto. Según la información publicada por el medio holandés NOS Sport, un grupo de operarios de la empresa ASO recorre los puntos clave del trazado de cada etapa horas antes de que pase la carrera, sobre todo las subidas a los puertos. Cuando se topan con estos dibujos, su labor consiste en disimularlos y convertirlos en mariposas, búhos u otros animales. Es el 'otro' trabajo del Tour, para el que también hace falta tener un punto de creatividad y originalidad...