El Maratón de Varsovia (Polonia) se celebró el pasado domingo y dejó una de las imágenes más crueles del deporte. La atleta keniana Recho Kosgei iba en primera posición cuando se cayó al suelo y no pudo levantarse a pesar de intentarlo en repetidas ocasiones. Durante varios minutos, impotente y desesperada, trató de ponerse de pie, pero no lo consiguió a pesar de sus esfuerzos. Ningún miembro de la organización se acercó para ayudarle, a pesar de estar a unos metros de la llegada.
Marek Hladik, un maratoniano eslovaco, se paró unos segundos para prestarle ayuda, pero no consiguió que se levantara y continuó la prueba. En ese momento, una rival de Kosgei, la etíope Bekelu Beji, pasó junto a la atleta keniana, pero siguió su carrera sin mirarla y finalmente ganó el maratón. La escena impactó a muchos aficionados, mientras que Kosgei tuvo que ser finalmente atendida por los médicos, según informaron los medios polacos.