Ni se hablaba mucho de él a la hora de hacer quinielas de favoritos ni él mismo abrió la boca en las fechas previas a la gran cita...
Pero llegó el día 'D' y Patrick Lange habló en la carrera para cerrar todas las bocas...
Así, sin hacer ruido ni 'antes' ni 'durante', el triatleta alemán conquistó el pasado sábado su tercer Mundial IRONMAN en Kona (2017, 2018 y 2024).
Además, firmó un nuevo récord de la prueba. Su registro en la meta de Hawaii de 7:35:53 rebaja el que logró el noruego Gustav Iden en la edición de 2022 (7:40:24).
A sus 38 años, corrió el maratón en 2:37:34, el segundo más rápido de la historia de Kona, sólo superado por el de Iden de hace dos años (2:36:15).
En la segunda transición estaba a 9 minutos de Sam Laidlow. 17 kilómetros después, Lange adelantaba al francés para enfilar en solitario, seis años después, el camino hacia su particular triplete.
¿Por qué el siempre comedido Lange explotó y mandó callar?
El 'después', ya como campeón, sí fue sonado. Su entrada en meta ya es historia. Lange soltó en ese momento de gloria toda la rabia contenida. Fue, más que un grito, un rugido. Y, a continuación, sin decir ya nada, mandó callar con un elocuente gesto...
Un volcán, en este caso de emociones, entró en erupción en Hawaii. Una reacción inesperada en un triatleta que siempre se ha mostrado muy comedido, en la victoria y en la derrota, y que él mismo explicaba en la rueda de prensa posterior.
"Ella quería que les diera una patada en el culo"
La madre de Patrick Lange falleció en 2020, víctima de un cáncer. Y el pasado sábado, cuando sus buenas sensaciones le indicaban que era el día, se acordó de ella.
“Cuando estaba corriendo por Ali’i Drive, en los primeros cinco kilómetros, realmente me impactó. Se me puso la piel de gallina por todo el cuerpo, incluso aunque tenía mucho calor. Y ese fue el momento en el que definitivamente la sentí. Ella murió en 2020 de cáncer. Y cuando estaba con ella en el hospital, cuando hablé con ella por última vez, me dijo: Realmente deseo que estés en ese escalón más alto. Realmente quiero que una vez más les des una patada en culo. Ese fue un gran 'por qué'. Y estoy muy orgulloso de haber hecho esto por ella", relataba un emocionado Lange en la sala de prensa, que rompía en una espontánea ovación.
"Mi mejor día estaba por llegar y nadie creía en mí"
“Siempre dije que mi mejor día estaba por llegar y nadie creía en mí, pero este era el día, era el día absolutamente perfecto. Y de nuevo, esto es para mi madre. Me siento agradecido de estar aquí”, añadía el triatleta germano, quien, ya más tranquilo y siguiendo la tradición, también regresó a la meta muchas horas después de su propia entrada triunfal para recibir a los últimos finisher...