Soy muy fan del trabajo de Clint Eastwood.
Es un grandísimo profesional en el más amplio sentido de lo que supone su oficio, tanto en su faceta de actor como en la de director.
Como todo, va en gustos... y tampoco busco encontrar complicidades.
Desde la saga de Harry Callahan "El sucio" o en el Sargento de Hierro como el Sargento Highway, hasta la ternura de Los Puentes de Madison haciendo del fotógrafo Robert Kinkaid... Mr. Eastwood ha pasado de ser el tío más duro de la pantalla al director/actor comprometido de la actualidad.
Para mí uno de los mejores en lo suyo, que es un negocio muy disputado, y lo creo porque sobre todo desde la mitad hasta ahora en el final de su carrera, cuando ha demostrado ser un hombre sensible y reflexivo (los mensajes de sus películas van mucho más allá de lo que pueda sobreentenderse). En sus primeras intervenciones delante de la cámara, asumió lo que el mundo esperaba de él, por su aspecto, por las necesidades del mercado.. .para luego dedicarse a hacer trabajos más personales que él mismo elegiría.
Este domingo a Froome le han dado por todas partes... y ha mostrado ser el mejor en lo suyo, posiblemente no por el estado de sus piernas, pero sí en su aplomo y determinación... teniendo muy en cuenta que al haber ganado esta barbarie tres veces con tanta facilidad, expuesto ahora a tanto estrés e infortunios, cualquiera habría entendido que clavara la rodilla.
Ha demostrado fuerza, templanza y creencia en él, con un Ag2R endemoniado, un pinchazo en el peor momento... Le dice tranquilamente a Landa cómo lo van a hacer, se pone en paralelo y se lo explica clarito, que se vaya hacia delante, que si el coche no viene, ya Kwiatkowski le da su rueda, luego Nieve le sube a toda leña, él se acerca, para que Landa se deje caer y le ayude con el tirón final de enganche... y ya se encarga él de lo que venga luego que para eso le pagan lo que le pagan.
Esta es la típica situación de respuestas espontáneas impecables que en las películas quedan de maravilla tras un meditado guión, de esas que dices "buah, por qué no se me ocurre reaccionar así en la vida real", pero que improvisarlo en mitad de un Tour de Francia... merece que le den el Oscar, en este caso el maillot amarillo y desde luego a Landa el de reparto con un merecido podio.
Aunque esto sólo es lo que a mí me parece, que seguro que otro lo ve respetablemente de otra forma totalmente distinta... y que como siempre, por mucho que discutamos, al final la carrera decidirá lo que le dé la gana, que es lo que hace que cada etapa sea un guión irrepetible.
Hoy me he tomado la licencia de abrir este post con una de las frases más célebres en los comienzos de la carrera del Señor Eastwood... así que la cerraré con una de mis favoritas en esta última fase en la que interpretando a Walt Kowalski, ha fusionado de manera magistral todos sus mejores registros: con genio áspero, con todo su corazón y un mensaje profundo entre líneas:
“¿Nunca os habéis cruzado con alguien a quien no deberíais haber puteado? Ése soy yo”. Gran Torino.