EL EXPEDIENTE CANYON
Antes de empezar con la Aeroad CF en particular, vamos a abordar el tema del que todo el mundo habla, pero que rara vez se trata en medios especializados. Somos conscientes de que Canyon, por su modelo de canal de venta directa, es una marca polémica dentro del sector de la bici, no tanto por el ventajoso precio que ofrecen sus bicis, que también, sino porque las bicicletas que llegan metidas en una caja a la puerta de la casa del cliente. Por supuesto que tenemos opinión al respecto, pero nuestro trabajo no es juzgar esto, porque objetivamente es lícito, obviamente hay mercado que está de acuerdo y hay demanda este tipo de relación comercial.
La labor de esta revista, TRIATLÓN, y el compromiso que establecemos para con los lectores y por supuesto con todo el sector profesional del que también somos parte y en el que también está Canyon, es testar las mejores bicis que ofrece el mercado, las que os interesan a los lectores y se venden en nuestro país. Así podéis conocerlas más allá de las descripciones y especificaciones técnicas que facilitan las propias marcas. El debate de esta situación y cambios en los hábitos de consumo, da como poco para hacer un artículo entero y nos quedaríamos con muchas cuestiones por tratar. Por eso, tras por lo menos mencionar el tema sin pasar de puntillas, nos centraremos en lo que es una realidad inapelable: que Canyon es una marca que interesa y que esta Aeroad CF, sin valorar ni su precio ni como llega al cliente, una vez montada y ajustada, es la mejor bici aero de ruta que se vende de serie en la actualidad, al menos en la actualidad que supone el momento de escribir estas líneas y en el que el listón ha quedado bastante alto.
EL DILEMA
Desde luego Canyon es una marca que rompe moldes, o al menos las convenciones a la que estamos acostumbrados. La mayoría de ocasiones procedemos del mismo modo a la hora dar por finalizado el test de una bici. Después de probarla durante nunca menos de dos meses, en un lado enumeramos un listado de cualidades y en otro lado un listado de características que, no siendo necesariamente defectos y sin intención de colarle a nadie eufemismo alguno, sí que pueden ser consideradas características particulares que nos sean válidas o recomendables para todos los públicos.
Sin embargo esta maldita bici nos ha dejado sin mucho trabajo en el segundo apartado porque, salvo dos detalles que ya nos consta que han previsto actualizar en breve y que ahora veremos…el resto de la bici es sencillamente perfecta, o al menos todo lo perfecta que permiten los recursos tecnológicos actuales de la industria de la bici. Lo tiene todo: mucha personalidad, mucha exigencia, mucho análisis y sentido común, para que cada argumento técnico y componente que presenta, no haga más que mejorar la bici y lo más importante, la experiencia de montar sobre ella.
EXPERIENCIA CANYON
Sobreentendiendo que era por pura cortesía, pero desde Canyon quisieron mandarnos la bici montada y les dijimos que no, que queríamos vivir la experiencia Canyon al completo. Recibimos la mejor caja de embalaje que hemos abierto nunca, con la bici premontada y ya ajustada. Una bolsa de tela de alta calidad guardaba toda la documentación, accesorios de cada componente y una llave dinamométrica por deformación que incluía un set de puntas con todas las medidas necesarias para ajustar la bici, de las cuales sólo usamos dos. En realidad usamos tres, una sierra de corte para el tubo de dirección y una guía Park Tool, necesaria para cortar una horquilla de ese nivel. En menos de diez minutos, siendo mecánicos profesionales y conociendo nuestras medidas exactas, porque la posición de conducción para llevar una bici de este nivel debe ser ajustada con total precisión, ya estaba lista para salir a rodar.
No esperamos mucho, en realidad no podíamos esperar mucho para salir a probar una bici diferente incluso en su color. No queríamos otra bici negra mate más y elegimos ese “rojo-mate-granate" que parece más un anodizado sobre aluminio que una bici de carbono, pero que viéndolo en su web luego no se correspondía con la realidad. Es un color al que, en sentido positivo, nunca te acostumbras, pero que como no te guste luego en vivo, te puedes llevar el disgusto.
LAS COSAS CLARAS
Así, tras cargar la batería desde el manillar integrado, que fija el distribuidor de cables Di2 que da acceso al cargador USB, salimos a tener la primera toma de contacto. A veces hacen falta sólo cinco pedaladas para saber la clase de bici que llevas entre manos…con la nueva Aeroad hicieron falta dos. Es un bloque…no titubea, no vibra, no duda…sólo corre como una bala y frena que impresiona gracias a los frenos Dura-Ace Direct Mount, delantero y trasero.
Mirad, como el negocio de Canyon es web, les haremos el favor de dirigiros a su web para que podáis empaparos de tecnologías y definiciones que, cosa que no sucede siempre, anuncian y describen de manera bastante realista lo que luego sucede en la carretera. De la experiencia acumulada en la Speedmax de crono y la Utimate de ruta, han dado con el equilibrio perfecto que une sólo lo mejor de ambas para hacer una bici con personalidad, no es un poco de ambas, es una bici diferente.
Todos los puntos de apoyo y empuje del cuerpo se sienten poderosos y las reacciones son enérgicas pero controladas. El manillar integrado, si bien no permite montar acople en una bici a la que pega totalmente estar en carreras de media o larga distancia y que es una actualización que está a punto de llegar (nos referimos a unas abrazaderas específicas para montar acoples en este manillar) , resulta una de las mejores opciones que hemos probado nunca.
Cierto es que este tipo de manillares limita las regulaciones de manillar a una fija, pero además de que han resuelto la incómoda cuestión del guiado interno de los cables por dentro del manillar añadiendo unas tapas impecables y que a su vez aloja el distribuidor de cables Di2, resulta el conjunto de manillar y potencia CF H11 es lo más rígido y ergonómicamente mejor diseñado que hemos podido probar. La geometría de la bici es bastante agresiva pero sin estridencias, no vemos mucho sentido usar la posición corta de las dos que ofrecen las punteras de la horquilla, en una bici pensada para marcar diferencias alta velocidad.
ÉCHALE UN OJO A TODOS LOS DETALLES EN ESTA COMPLETA GALERÍA
Todo lo que hagas sobre la bici es mejor: curvear, esprintar, rodar, subir…es muy buena, de verdad que lo es. Sólo le encontramos el defecto de que teniendo la tija aero y aunque ofrezca unos ajustes de avance de -1 mm y 15 mm de retraso, no dispongan de una tija con avance para acompañar a ese acople que anuncian para el manillar aero. En lo referente al montaje, no vamos a entrar en el precio sino el buen criterio, sólo podemos darle la enhorabuena al jefe de producto porque ha acertado en todos y cada uno de los componentes de esta bici en la que incluso los platos, con el equilibrado desarrollo 52-36 de serie, y las cubiertas, Conti GP4000 de 23 delante y 25 detrás, han sellado una bici de referencia.
Más información: Canyon Aeroad